Después de mucha incertidumbre y de una vista judicial, ya es oficial. La Liga se iniciará el próximo viernes, con el Athletic-Barça en San Mamés. La resolución cautelar del juzgado mercantil de Madrid ha decretado que habrá fútbol los viernes, pero no los lunes; para poner un punto y seguido en los meses de negociaciones, disputas, confrontaciones e improperios, entre Liga y RFEF, que han precedido y sucedido al auto.

La Federación reaccionó rápido y con contundencia, con una comparecencia marcada por el júbilo de Rubiales y, aprovechando la ocasión, con un extenso y duro análisis de la sentencia que culminó con un ataque directo al presidente de LaLiga: «Consideramos que la etapa del señor Tebas tiene que terminar, no puede seguir ni un minuto más al frente de una institución como la Liga de Fútbol Profesional», dice la RFEF.

El juez Andrés Sánchez Magro admitió parcialmente las medidas cautelares que pedía LaLiga, después de la vista oral del miércoles, y mantiene, a medias, el fútbol fuera del fin de semana que prohibió la jueza única de competición de la RFEF. Pese a ello, LaLiga, contrariada con la decisión, anunció rearme (en forma de Asamblea Extraordinaria con los clubs) y contraataque (con un recurso contra la sentencia): «LaLiga no está de acuerdo con el auto y va a proceder a ejercer su derecho de trasladar un recurso de apelación».

PARTIDOS AFECTADOS / Después de la resolución, que pone algo de cordura en la guerra por los horarios, el campeonato nacional de Liga comenzará en viernes, como había previsto LaLiga, pero dos partidos están obligados a cambiar de fecha respecto al horario anunciado por la patronal, luego corregidos por la RFEF. Los partidos previstos para el lunes 19 de agosto se disputarán el sábado, el Mallorca-Eibar (20.00) y domingo, el Betis-Valladolid (21.00), lo que ha movido de horario el Atlético-Getafe, que pasa de las nueve a las diez de la noche del domingo. En la segunda jornada, el partido del lunes era el Leganés-Atlético, que se jugará el domingo 25 (19.00) y ha provocado el cambio del Mallorca-Real Sociedad, que pasa de las siete a las cinco de la tarde del mismo domingo. La tercera jornada, sin partido de lunes por ser previa a una convocatoria de la selección, no varía.

La reacción de Luis Rubiales y de la Federación fue rápida y espectacularmente dichosa, con convocatoria inmediata a los medios para celebrar lo que, a todas luces, asumen como un éxito judicial, pese a que la sentencia es sobre medidas cautelares y a que será recurrida por La Liga.

«Es un día histórico. Se ha cumplido mi compromiso con el fútbol español. Estamos muy satisfechos y felices. Es el momento de alegrarse por las aficiones, también por los clubs», dijo Rubiales, visiblemente satisfecho, media hora después de que se hiciera pública la decisión. El presidente de la RFEF hizo un discurso triunfalista, en el que llamó al entendimiento con los clubs, pese a su apoyo a Tebas, con el que tienen una nueva reunión para volver a hacer una demostración de fuerza. Fue el propio ente federativo el que, de forma institucional, hizo después una valoración de la sentencia en la que señala a Javier Tebas como el gran enemigo a derrocar. «El señor Tebas ha puesto en jaque al fútbol español. Su megalomanía ha situado al fútbol en una crisis insostenible. Los clubs profesionales deben estudiar si ha llevado a cabo una correcta administración de la institución», sentencia el comunicado de la RFEF.

MENSAJE DE TRANQUILIDAD / En medio del equilibrio momentáneo que ha intentado encontrar el juez en la cuestión, LaLiga conserva su bastión de los viernes y, como explicó en su corta y medida explicación institucional, mantiene intactos los compromisos con las televisiones, uno de los grandes argumentos que planteó a su favor en la vista judicial y un arma arrojadiza que ha utilizado sin medida para crear alarma y temor entre los aficionados. «Pese a la resolución, LaLiga va a poder garantizar a los operadores de televisión, nacionales e internacionales, diez bandas horarias diferentes, sin solapar», tranquilizaba la patronal.