Pese al último buen resultado en Liga en el Calderón y el paso adelante del Submarino en la Europa League, el clima que se respiraba ayer en la Ciudad Deportiva no estaba acorde con el optimismo que podría esperarse de tan buena racha. La razón hay que buscarla en la negativa de la LFP a retrasar el encuentro de este mediodía para otorgar a los amarillos unas horas más de descanso tras el palizón de Nápoles y el posterior regreso .

Marcelino era bastante claro. “Estamos cansados. El viernes estábamos peor, cansados y con sueño. Vamos a ver como estamos mañana...”, decía en la tarde de ayer el preparador asturiano, en una especie de irónicas gracias a la LFP por dificultarle la vida a uno de sus representantes en Europa.

Así las cosas, el técnico asturiano cree que este mediodía, ante el Levante, a su equipo le va a resultar bastante complicado “dominar y controlar el encuentro durante los 90 minutos, y con el desgaste de Nápoles será un poco más difícil todavía aunque pese al cansancio vamos a intentar hacer las cosas lo mejor posible”.

CAMBIOS OBLIGADOS // Como ya anunció prácticamente desde la clasificación para los octavos de la Europa League, Marcelino intentará minimizar los efectos del desgaste físico a base de rotaciones. “Estamos obligados a hacer varios cambios; el cuerpo no da para todo”, justificaba el preparador groguet, que añade a las dificultades los cambios experimentados por su rival en el mercado de invierno. “Han incorporado buenos refuerzos, como Rossi o Verdú, que han cambiado la dinámica”, apuntaba Marcelino. “Ya nos ganaron en la primera vuelta y sabemos de lo que son capaces. Nos van a exigir mucho”, añadía el técnico, que tampoco perdía de vista ayer la posibilidad de que la 26ª jornada pueda cerrarse con una ventaja casi definitiva en zona de Champions: “El Sevilla tiene uno de sus partidos más difíciles [Barça] y podemos irnos a 11 puntos. Es una cita muy importante para nosotros”. H