Para remontar un 0-4 a la Roma, hace falta una acción casi divina. Mario es consciente de ello y aprovechando que el Villarreal mañana visitará al papa Francisco en el Vaticano, no esconde uno de los deseos que el vestuario le trasladará al santo padre: "Le pediremos un milagro, aunque no sé si nos hará mucho caso", bromea el lateral de Novelda. Ya más en serio, Mario admite que la visita es "algo histórico para uno personalmente y para el club, que te reciba una entidad como el Papa es un orgullo".

Centrándose ya en el fútbol, el defensa amarillo afirma que la victoria ante la Real Sociedad ha surtido el efecto deseado en el vestuario: "La victoria en el partido contra la Real Sociedad da mucha moral y tiene que servirnos para los próximos partidos". A la hora de valorar el encuentro de vuelta contra la Roma, Mario tiene claro cuál debe ser el objetivo del Submarino: "Hay que hacer el mejor partido posible y si se abre alguna puerta a la remontada, intentarlo. Hay que intentar ganar para lavar esa imagen".

Recordando el partido de ida, el de Novelda hace el siguiente análisis: "Fue un accidente, un partido aislado y hay que demostrarlo. Ellos son un gran equipo, lo demostraron en la ida, es un grande de Italia y tenemos que demostrar que podemos competir con ellos".

Cuestionado sobre si el Villarreal tiene trazado una hoja de ruta para intentar la machada, reconoce lo siguiente: "No hay plan para remontar, lo planteamos como ir a ganar, buscar la remontada, pero plantear como si estuviera viva. Es muy difícil, prácticamente imposible, pero a veces ocurren esos partidos. Alguna vez pasa, ojalá sea esta".