Como el Villarreal en su objetivo de alejarse de la zona de descenso, Mario Gaspar dio ayer otro pasito hacia la historia de la entidad amarilla. El defensa noveldense cumplió en Ipurua el que es su 328º encuentro oficial con la primera plantilla del Submarino, una cifra que le permite erigirse como el tercer futbolñista con mayor número de partidos en el club.

Mario llega al podio de históricos del Submarino casi 10 años después de su primera aparición, en marzo del 2009 en el Vicente Calderón, de la mano del chileno Manuel Pellegrini. Tenía entonces solo 18 años y tendría que esperar un par más para asentarse, ya de manera definitiva, en el primer equipo, en el que ha pasado por todos los estados de ánimo posibles: desde la euforia de una clasificación para la Champions, a la angustia de un descenso y, de nuevo, la cara amable del fútbol con el último ascenso, ya convertido en titular indiscutible del Submarino.

Con 28 años, Mario aún tiene cuerda para rato y margen para intentar dar alcance a las dos leyendas que le precenden en el triunvirato de jugadores con más presencias oficiales con la acamiseta grogueta. Bruno, estancado en los 418 partidos desde hace más de un año por los problemas físicos que le mantienen apartado de los terreno de juego desde mayo del 2017, todavgía está muy lejos del alcance del lateral, que ve mucho más cerca la opción de sobrepasar a Marcos Senna, el segundo futbolista con más encuentros en la historia de la entidad amarilla. «No puedo más que sentirme orgulloso por poder formar parte de esta familia. Los nombres que tengo a mi lado forman parte de la historia de este club», señala Mario sobre su ascenso a la tarcera plaza del ránkingm, de la que ayer desplazó a otro amarillo ilustre, Cani, que abandonó el club dejando atrás 327 encuentros oficiales. Para Mario, la marca cobra mayor importancia si se tienen en cuenta las titularidades. En más del 90% de sus apariciones, mario lo hizo formando parte del once inicial del Submarino.

Mario no pudo celebrar ayer con tres puntos su entrada en el podio de leyendas del conjunto amarillo, pero confía en que los siguientes encuentros servirán para enderezar un poco más la situación en LaLiga. «Seguro que si conseguimos encadenar los dos próximos encuentros en casa —ante Getafe y Athletic, rival directo en la zona baja— se verán las cosas de manera diferente», señala el hombre que ha cogido la responsabilidad de llevar el brazalete de capitán del Villarreal ante la prolongada ausencia de Bruno.

«Debemos generar más»

Ayer, en Ipurua, volvió a lucir la cinta azul en su brazo derecho tras el paréntesis obligado ante el Madrid por sanción y que retrasó su condición de tercer futbolista con más partidos en el club. Como la mayoría de sus compañeros, el de Novelda notó indicios de reacción. «En otro tramo de la presente temporada hubiéramos perdido», dice el defensa, que destaca la capacidad de sacrificio del equipo en un encuentro tan complicado. «La pena es que no hubiéramos podido acertar en una de las dos o tres claras acciones en las que rozamos el gol, aunque la verdad es que deberíamos ser capaces de generar más». «Quizás la situación en la que estamos obligaba a sumar de tres en tres, pero visto lo visto en el campo damos el empate en Eibar por bueno», sentencia.