La carrera era a 27 vueltas. Era el quinto gran premio de la temporada. No llovió y, por tanto,la incertidumbre desapareció de pronto. Marc Márquez (Honda), lider del Mundial de MotoGP, pese a ser el único 'magnífico' que ya suma un cero en su clasificación (se cayó en EEUU, cuando dominaba a placer la carrera), había demostrado en los ensayos del viernes y sábado que no pensaba dejar escapar la oportunidad de triunfar, a lo grande, en Le Mans (Francia), pese a que Maverick Viñales (Yamaha) y Fabio Quartararo (Yamaha), además, claro, de las Ducati oficiales de Andrea Dovizioso, Danilo Petrucci y Jack Miller podían amenazarle.

Márquez puso tierra de por medio

Márquez solo permitió, en efecto, que hubiese carrera en los ocho primeras vueltas, cuando un tremendo y peleón Miller (todos dicen que el único piloto de la parrilla con valor de pelearse con el catalán si tuviese una moto 'pata negra'), que le complicó las primeras vueltas. Solo las primeras. En la octava, concretamente, Marc y Jack se pasaron hasta tres vueltas y, al final, el catalán se escapó. O empezó a poner tierra de por medio.Cuando?, cuando desde el muro, en el paso de la novena vuelta, la pizarra le avisaba de que, aunque estaba peleándose con Miller, lo cierto es que 'Dovi' y Valentino Rossi (Yamaha) se acercaban peligrosamente. Fue ahí donde Márquez, llamao el 'Marciano' en Italia, empezó a rodar en 1.32 bajos, mientras sus perseguidores, lo hacían en 1.32 altos y, así, vuelta a vuelta, décima a décima, logró un colchón de dos segundos y se acabó la carrera.

Márquez volvió a estar intratable

Márquez empezó impresionante en Catar lo recuerdan?, perdió solo por 20 centímetros y 23 milésimas de segundo respecto a Dovizioso. Ganó de calle en Termas de Río Hondo, en Argentina, muy fácil. Iba a ganar, igual de fácil, en Austin (Texas, EEUU), donde nunca, nunca, había perdido. Y, en Jerez, en casa, en el debut del Mundial en Europa, volvió a estar intratable en el nuevo estilo, que dice que no es el suyo ni le gusta ("prefiero triunfos peleados"), pues volvió a escaparse.El Mundial que llegó a Le Mans estaba vivo, está, por supuesto, porque,como reconoció el propio Rossi, "Marc nos ha regalado un cero, 25 puntos, con su caída sorpresa en EEUU, pero él sigue dominando con mano de hierro". el también catalán Àlex Rins (Suzuki), que ganó en Austin aprovechando la caída de Márquez, hoy ha terminado 10 (arrancó en el puesto 19 y, claro, ya no es segundo del campeonato. Como 'Dovi',que sigue corriendo conservadoramente y le será imposible pelearle, de nuevo, el título al catalán si sigue así.

Ganó con el nuemático blando

"Hoy era muy fácil, mucho, cometer errores en esta pista. Es la primera vez que ganó con el neumático blando, nunca antes lo había hecho y, la verdad, al final era muy sencillo caerse. He estado muy concentrado las 27 vueltas y, la verdad, creo que es un grandísimo triunfo para nosotros, pues se trata del triunfo 300 de Honda en el Mundial de la categoría 'reina' y me da mucho placer y orgullo haberla conquistado yo", señaló Márquez, abrazado locamente, en el 'corralito' de Le Mans, por su padre Juliá, su hermano Àlex (vencedor en Moto2), su manager Emilio Alzamora y su ingeniero Santi Hernández.

Mundial de MotoGP: 1. Marc MÁRQUEZ (España), 95 puntos; 2. Andrea DOVIZIOSO (Italia), 87; 3. Àlex RINS (España), 75; 4. Valentino ROSSI (Italia), 72 y 5.Danilo PETRUCCI (Italia), 57.