Diversión y aprendizaje a partes iguales. Y es que la pasión por el Villarreal no tiene edad. El Submarino cuenta en su fútbol base con casi un centenar de niños y niñas que forman parte del curso de psicomotricidad. Todos dan sus primeros pasos en el deporte. Se lo pasan en grande y además aprenden a desarrollar sus habilidades motrices básicas en las inmejorables instalaciones de la Ciudad Deportiva y con profesionales especializados.

Los juegos preparados por los monitores provocan que se desarrollen los pequeños, pero sobre todo que se diviertan. Risas, deporte, compañerismo…

cuatro turnos en dos días / Hay cuatro turnos diferentes repartidos en dos días, miércoles y sábado. La coordinadora de Psicomotricidad del club, Mariam Vera, tiene claro cuál es el objetivo: «Lo fundamental es cuidarlos, tratarlos bien y que vengan cómodos a entrenar. Y sobre todo que disfruten. Nuestro objetivo es que tengan ganas de volver a venir».

Desde la temporada pasada se creó una liga de querubines para que los niños pudieran jugar partidos: «Ya llevamos más de diez años con este curso y estamos muy contentos. El futuro se presenta aún más ilusionante».

El plazo de inscripción continúa abierto, aunque las plazas para niños y niñas de 3 y 4 años están copadas. Sí que hay unas pocas para pequeños de cinco años. Para inscribirse tan solo hay que rellenar un sencillo formulario en la web del Villarreal.

«La psicomotricidad te da unas pausas para desarrollar al niño en el mundo del deporte. Es una ayuda para que los pequeños se puedan desarrollar con las mejores garantías», asegura Mariam Vera. El futuro está asegurado.