El día D es el domingo y la hora H, las 12 del mediodía. En ese momento, como si se tratase de una última jornada en la que todos los partidos con algo en juego arrancan a la vez, el Castellón se juega un elevado porcentaje de su salvación. Sí, todavía quedarán 10 encuentros más, 30 puntos, pero lo que suceda dentro de cinco días, sin ser determinante, está llamado a marcar el último cuarto de la temporada.

El Valencia Mestalla-Castellón empieza a las 12.00 horas en el campo Antonio Puchades de la Ciutat Esportiva de Paterna. Al mismo tiempo, los albinegros juegan en otra Ciudad Deportiva, la Dani Jarque, con los orelluts aliados del Espanyol B frente al Conquense. Lo mismo que en La Almozara, en su caso siendo unos aficionados más del Ebro frente al Peralada. Y animando al líder, el Atlético Baleares, en Ontinyent, sin perder de vista un duelo entre equipos implicados en la permanencia: Atlético Levante-Alcoyano. Para la tarde (17.00 horas) queda el Teruel-Sabadell, esta vez con los arlequinados en una posición más desahogada... aunque para nada tranquila aún.

LO MEJOR Y LO PEOR // Es uno de esos días en el que si todo sale redondo, el Castellón, aunque sea por mejor diferencia de goles general (-3, igual que el Peralada y mucho mejor que el resto), podría salir del descenso directo. Eso significaría que ha ganado al filial che, sino descartándole de todo, sí hundiéndole: serían cinco puntos más el cara a cara particular, a raíz del 1-1 de la primera vuelta en Castalia. Pero si todo sale mal, ¡ay si todo sale mal!: eso implicaría una nueva derrota y la vuelta a lo más hondo de la clasificación, puede que distanciados ya en hasta seis puntos de la permanencia, que sería un máximo... y estar ya con pie y medio de regreso a Tercera División.

El Castellón hace tiempo que camina sobre el filo de la navaja, angustiado cada jornada que pasa sin que llegue esa victoria que sacuda parte de la ansiedad que atenaza a los futbolistas, sobre todo en Castalia, después de dos partidos muy similares y, sobre todo, con un desenlace similar: de más a menos frente a Teruel y Atlético Levante, dos rivales directos a los que empezó derrotando, pero que salvaron dos puntos en los 20 minutos finales.

Además, el balance de la próxima jornada, la 28ª, no solamente se medirá en la cosecha de puntos, ni siquiera en como quede la clasificación. Se trata, además, de ese intangible que son las sensaciones, la moral, el factor psicológico, que si bien no puede medirse desde el punto de vista de un frío dato, a la postre también resulta determinante en el cómputo global. Aquí, el Castellón anda igual o más necesitado.

Porque si pesa Castalia con el runrún de los 10.000 fieles, a domicilio es esa losa de no haber ganado aún esta temporada, camino de los 10 meses de su última victoria fuera de casa. Si ésta no llega frente al colista (el Mestalla, encima, es el peor local: solo 11 puntos de 39 posibles), uno ya no sabe pensar cuando llegará...