Kiko Ramírez no pierde esa flor de los últimos minutos, aunque él cree que es mérito de sus hombres, por no rendirse jamás. “Estamos acostumbrados a sufrir hasta el último suspiro, es el ADN que tenemos”, corroboró en Sedaví, donde el 2-3 permite entrar al Castellón, en el sorteo de esta tarde, como tercero.

“Me gusta entrar así a los play-off, sufriendo. Los que sufren hasta el final, son los que ascienden”, destacó el tarraconense, para quien esta circunstancia les da “vitaminas”. “El equipo tiene que confiar en que puede conseguir los objetivos en el último suspiro, porque somos un equipo que pelea por cada balón y que trabaja hasta el final”, reiteró.

Aunque la alineación de ayer no se parecerá en prácticamente nada a la que ponga en liza el próximo fin de semana, en la ida de la primera ronda, Ramírez reivindicó a los que, en las últimas jornadas, han contribuido a mantener la inercia ganadora del Castellón (17 puntos sobre 21): “Yo no hablaría de suplentes”.

“Tengo un lío muy grande para el próximo domingo”, avanzó, en alusión, precisamente, a la composición del once. Un ejemplo es el de Vicent Albert: dos tantos en los dos ratos que le ha dado. “Es un chico que vive del gol y que hace goles. Tiene que mejorar en lo físico, pero ha llamado a la puerta; mejor dicho, la ha tirado abajo”, explicó. Ramírez ratificó que Fabiani no pudo debutar por problemas en la tramitación de su ficha y no cargó la responsabilidad en Saizar, que tuvo 45 minutos después de no jugar desde mediados de octubre: “Le ha costado entrar en el partido, aunque el campo tampoco le ayudaba”.

Ramírez aplaudió, nuevamente, a Meseguer, que había sido “el hombre del partido”, a pesar de que solo le dio la segunda mitad.

sin PREFERENCIAS // Como en los últimos días, Ramírez pasó muy de puntillas sobre sus impresiones en torno al sorteo: “No me preocupa nada, solo empezar bien”. “Estaría preocupado si el equipo no estuviese bien o si no tuviese hambre”, matizó. H