El domingo a las 17.00 horas Iván Medall y Frank Castelló se verán las caras en Almassora. Los entrenadores, en un ambiente más distendido de lo que les espera en el Pesudo, se retaron ayer en Mediterráneo. Preguntados por el partido que esperan, el anfitrión Medall responde lo siguiente: «Ellos fuera de casa juegan más prácticos y consistentes, saben que no tienen por qué llevar la iniciativa y conceden menos». Castelló añade que «la clave estará en el acierto; será difícil para los dos», pero augura «un partido con pocos goles».
Por el Almazora, su técnico coincide en que «ellos tendrían más chances de ganar si hay muchos goles», así que espera «un partido disputado y a pocos goles. Quien marque primero tendrá mucho ganado». Pese a que Medall cede el cartel de favorito al rival, no firma el empate: «Para nada. En casa debemos hacernos fuertes».
En el tema de bajas, Medall confirma que Fandos y Mateos «estarán algunos partidos fuera», mientras Vicente Bosch «es duda». Para Castelló, la lista es más amplia: «No estará gente importante como Zagalá, Arturo, Marenyà, Álex López, Jesús o Salt».
En lo que sí coinciden es en esperar «mucha gente. El partido lo requiere y a los jugadores les dará un punto más», asume Medall. «Queremos que sea una fiesta del fútbol. Se nota que la gente está con los jugadores, la afición se ha implicado con el equipo y viajarán muchos», apunta Castelló. H
