En el calendario del Mini Submarino en su asalto hacia al ascenso a Segunda División no estaba marcado en rojo el envite de ayer. Pese a que el viernes Paco López ya había advertido que la cita liguera en el feudo del colista iba a ser ‘engañosa’, nada hacía presagiar que el filial groguet iba a regresar con las manos vacías de las tierras baleares de Lloseta, como finalmente así fue tras caer contra pronóstico por la mínima y, una jornada más, con polémica arbitral incluida.

Y es que si la pasada semana los de Paco López tuvieron a razón lamentar tres posibles penas máximas a favor no pitadas en el choque ante el Alcoyano, ayer fue un gol mal anulado con 0-0 en el marcador el que lastró las aspiraciones amarillas.

Porque apenas se habían disputado cinco minutos de partido cuando uno de los dos hombres gol del filial vila-realense, Fran Sol, lograba certificar el mejor arranque visitante batiendo al guardameta del Llosetense...

GOL MAL ANULADO // ... En fuera de juego según el colegiado de la contienda. Un posición antirreglamentaria inexistente que espoleó a los visitantes y desactivó durante un tramo del partido el inicial empuje del primer filial del Villarreal.

Lo suficiente, de hecho, para que apenas cuatro minutos después y casi en la única ocasión clara para el Llosetense, el colista del Grupo III de la categoría de bronce anotara el que, a la postre, sería el único gol del choque gracias a un certero tiro desde fuera del área de Nico Baleani ante el que nada pudo hacer Aitor.

Desde ahí y hasta el final del encuentro, 80 minutos de asedio sin recompensa del Villarreal B que pese a la inesperada derrota en casa del colista, continúa líder y con tres puntos de ventaja sobre el Reus, segundo clasificado. H