Con una medalla de plata en la final de los 400 estilos, Mireia Belmonte despidió su mejor actuación en unos Mundiales de natación, que cierra con tres medallas individuales y un total de seis en el botín de la delegación española.

La nadadora badalonesa, de 26 años, solo cedió ante la estrella húngara Katinka Hosszu, campeona olímpica y mundial y heroína local, que se llevó el oro con un crono de 4.29.33 minutos, nuevo récord del campeonato. Belmonte concluyó en 4.32.17, muy cerca de su récord de España. El bronce fue para la canadiense Sidney Pickrem (4.32.88).

«Creo que ha sido un buen 400 para acabar el campeonato», afirmó Belmonte, feliz por concluir los Mundiales «mucho mejor» de lo que los empezó el domingo pasado, cuando quedó fuera de las finales de los 400 libre y los 200 estilos. «He superado mis expectativas. Lograr un oro lo veía inalcanzable. Cuando en mariposa me metí tercera y me noté rara, no lo veía claro. Fue especial también el 1.500 junto a Ledecky y la última plata», añadió.

Belmonte tenía una cuenta pendiente con los Mundiales. Hace dos años, por una bursitis, tuvo que renunciar a Kazán para no perjudicar su preparación para los Juegos de Río, donde alcanzó su sueño del título olímpico. Pero en estos campeonatos ha vuelto a confirmar su clase. Son 23 las medallas que acumula Mireia a nivel internacional (4 en los Juegos, 6 en Mundiales, 13 en Europeos), convertida en una de las mejores deportistas españolas.

LA ESTRELLA // El estadounidense Caeleb Dressel, de 20 años, ha sido la gran figura en Budapest con sus siete oros, igualando a Michael Phelps en Melbourne-2007. Dressel ganó tres oros individuales (50 y 100 libre y los 100 mariposa) y añadió ayer el 4x100 estilos a las tres medallas por equipos que ya tenía en Hungría.