Siendo sensatos, la cuarta plaza está muy difícil». Lo dijo Escribá el viernes y lo repitió el sábado Trigueros. No les falta razón. El Villarreal cerrará este sábado una gran primera vuelta contra el Valencia en La Cerámica. Ninguno de los cuatro primeros claficiados ha sido capaz de ganarle y ha sumado la nada desdeñable cifra de 31 puntos, siendo, además, el equipo más fiable defensivamente. Pero ni con esas.

Para estar entre los cuatro primeros en la mejor Liga del mundo hace falta algo más. Barça y Madrid juegan directamente a otra cosa, mientras el Atlético, pese a su manifiesta irregularidad, no es rival a día de hoy en un torneo de 38 partidos. El Villarreal acabó el último curso en puestos Champions sobre todo por méritos propios, pero también por los deméritos de equipos como Sevilla o Valencia, que acabaron a 12 y 20 puntos, respectivamente, pese a tener bastante más presupuesto que el club amarillo.

Por desgracia para los vecinos, y pese a su última alegría, este año tampoco lucharán por los mismos objetivos, pero lo cierto es que el Sevilla sí parece que ha dado con la tecla con Sampaoli y habrá que hacer muy bien las cosas para poderles dar caza. Tendrá que mostrás otra cara mejor que la de Riazor, donde, a pesar de sus siete bajas, el Submarino contaba con un once competitivo que estuvo lejos de su nivel.

Para estar entre los mejores, un equipo no se puede encomendar únicamente a su defensa y portero, por mucho Asenjo que sea.