El impacto del Mobile World Congress en la ciudad de Barcelona afecta al tráfico, a los hoteles, a los restaurantes y al transporte público. Durante la celebración de la feria los hoteles se frotan las manos debido a la alta ocupación, unida a un importante aumento en los precios. Esto ha hecho que el Sporting haya tenido que alojarse lejos de la capital catalana al no encontrar habitaciones libres.

Los hoteles tienen colgados los carteles de "completo" y esto ha provocado que el equipo gijonés se tenga que alojar a 41 kilómetros de Barcelona, lejos de su habitual elección: el Hotel NH Sants. Concretamente, se han desplazado a Sant Esteve de Sesrovires, al Hotel Barcelona Golf.