La primera cita de la Copa del Mundo de pista 2018-19, celebrada en el Velódromo de Saint-Quentin-En-Yvelines (París), llegó ayer a su fin sin que Sebastián Mora haya podido alcanzar el podio, aunque el de Vila-real se ha quedado muy cerca en dos ocasiones.

Si el pasado viernes Mora fue cuarto en la prueba de puntuación, ayer fue quinto en madison junto a su compañero Albert Torres, que el sábado se había hecho con el oro en omnium.

La dupla española se vio penalizada en esta ocasión por el extraño devenir de la prueba, muy alejado de los cauces habituales sobre los que suele desarrollarse esta disciplina, ya que no propició que ninguna pareja lograra sumar vuelta. Y en este contexto, la supremacía de la selección danesa, formada por Lasse Norman Hansen y Michael Morkov, en los esprints intermedios fue letal.

Mora y Torres, muy marcados por sus principales adversarios, finalizaron en quinta posición tras ganar el tercer esprint y ser segundos en el último, además de ser terceros y cuartos en otros dos, para concluir con un total de 14 puntos. Con tan solo tres más, los australianos Howard y O’Brien subieron al cajón como terceros, mientras que la plata acabó yendo a parar a manos de los polacos Staniszewski y Pszczolarski con 19 puntos.

Norman Hansen y Morkov, que cumple en la carretera con el papel de lanzador de los exitosos velocistas del Quick Step, se impusieron con 39 puntos tras ganar cuatro esprints, incluido el último, y ser segundos en tres.