Tan solo tres puntos impidieron que Sebastián Mora y Albert Torres subieran al podio en la madison de la Copa del Mundo de Pruszkow (Polonia). Los ciclistas españoles comenzaron liderando una carrera que al final se les escapó por el acierto estratégico de las parejas rivales. El equipo firmó el primer cinco de la final tras una estrategia —cada vez más habitual en la dupla española— que consistió en proponer un ritmo elevado y de ataque en carrera. Esa exigencia física expuesta en los primeros momentos les pasó factura y pronto cedieron.

Francia se mostró como la más efectiva en el esprint intermedio y eso le sirvió para colocarse en la primera posición de forma momentánea, justo por delante de Mora y Torres. Entonces, una Australia desaparecida hasta el momento entró en acción, y lo hizo a lo grande con un acto de presencia a mitad de carrera que no dejó indiferente a competidores ni espectadores.

UNA FINAL IGUALADA // El equipo australiano formado por Cameron Mayer y Callum Scotson ganó la vuelta y tomó el protagonismo de la madison. Cosecharon la primera plaza en un paso puntuable que ya no perderían hasta el final gracias al resto de puntos que sumaron en los pasos.

Francia, que parecía asentada en la segunda plaza, sufrió un revés al final del evento al ser superado por una Bélgica que fue de menos a más. Los belgas pugnaban con el equipo español por la tercera plaza cuando firmaron un esprint ganador sobre la bocina que les permitió subir hasta el segundo escalón del podio. Francia cayó al tercer puesto y España no tuvo tiempo suficiente para reaccionar.

El cómputo global de la carrera destacó a los australianos sobre los demás con 31 puntos. La plata se la colgó Bélgica con 29 puntos, mientras que Francia sumó 27. España acabó la prueba de ciclismo en pista con 24 puntos y estuvo peleando hasta el final por conseguir la tercera plaza, aunque no pudo ser.