Un gato negro, la mala suerte o girar la tortilla de una vez. O porque tal como dijo Chente García Acosta, en la meta de Alhama de Murcia, "ganar, aunque parezca fácil es muy complicado". El conjunto del Movistar se volvió a quedar sin premio en esta Vuelta a España después de volver a buscar un triunfo con ahínco, en esta ocasión con el corredor local José Joaquín Rojas, quien tuvo que conformarse con la segunda plaza de la etapa murciana, que finalizó en la localidad de Alhama de Murcia, por detrás de Matteo Trentin, el corredor italiano del Quick Step, que ya venció hace una semana en Tarragona.

La jornada estuvo marcada por la ascensión al puerto de Collado Bermejo, o mejor dicho, por el descenso, donde atacó Vincenzo Nibali, entre los favoritos, y quien trató sin éxito de poner en jaque a un intratable Chris Froome. Al final, fue Nicolas Roche el más beneficiado del día, al demarrar en la fase final de la bajada y presentarse a la meta con medio minuto de ventaja. Ahora está empatado con Esteban Chaves, segundo de la clasificación, a 36 segundos del jersey rojo. Este miércoles habrá una nueva llegada en alto, al observatorio de Calar Alto, en Almería.