No ha sido este un verano más para Mateo Musacchio. El argentino pudo cambiar el Villarreal por el Milan, aunque finalmente ha jugado los 90 minutos tanto contra el Mónaco como ante el Granada, y por sus palabras, parece que seguirá haciéndolo durante bastante más tiempo: “Estoy bien en el Villarreal. Esta es mi casa y no tengo nada que decir; solo gracias a los empleados y a la familia Roig”.

El central asume, eso sí, que ha pasado “por momentos no tan lindos”, pero añade que “el fútbol está para disfrutarlo” y quiere empezar a disfrutar desde ya. Concretamente, desde el martes contra el Mónaco: “Solo pensamos ya en ese partido, que será una final, aunque tenemos todas las opciones de ganar ahí”.

Sobre el empate en Granada, afirmó que “nos vamos con sabor amargo porque hicimos más cosas para llevarnos los tres puntos, pero viene bien para encarar lo que viene”. Así, añadió que “el equipo respondió bien, fue un gran partido de todos pese a que hacía mucho calor. El equipo salió a ganar y tuvimos más ocasiones claras, pero con mérito no se ganan los partidos, hay que meter los goles y no nos alcanzó”.

A su vez, el meta Sergio Asenjo señaló que “el Villarreal ha hecho un fantástico partido pese al esfuerzo y cansancio del miércoles. Sacamos muchas cosas positivas aunque ellos han tenido fortuna, pero no se le puede pedir más al equipo, que ha dado la cara cuando pensaban que tendríamos la mente en Mónaco”. Por ello, “nos vamos con buen sabor de boca. El trabajo ha sido fantástico y ahora hay que recuperar domingo y lunes y cargar las pilas”. H