El Villarreal no será este enero uno de los animadores del mercado de invierno, pero sí que estará pendiente de ejecutar algunos movimientos que en estos momentos se encuentran sobre la mesa del consejero delegado, Fernando Roig Negueroles. Tres nombres propios centran el trabajo en los despachos. El primero, el de un jugador perteneciente a la primera plantilla, Alfred N’Diaye; los otros, los de dos futbolistas con contrato en vigor con el Villarreal, pero actualmente en calidad de cedidos en otros clubs de Primera División: Adrián Marín y Nahuel Leiva.

N’Diaye volverá hoy a los entrenamientos sin tener todavía claro su futuro en la segunda parte de la temporada. El Villarreal no está dispuesto a regalar a un futbolista que costó cerca de ocho millones de euros el pasado verano y en caso de que no llegue ninguna oferta satisfactoria el franco-senegalés seguirá como mínimo hasta el próximo verano. Pero en el club no descartan que pueda surgir en las próximas semanas opciones para negociar la salida del exbético. El buen cartel del jugador en su país natal, Francia, facilitaría un destino en la Ligue 1, donde el Olympique de Marsella sigue siendo el club en el que el nombre de N’Diaye suena con más fuerza. Andoni Zubizarreta, el director deportivo del conjunto galo, tendría al amarillo en su agenda como principal opción para suplir la marcha de Lass Diarra, que apunta al Inter de Milán en la nueva ventana de fichajes.

El futuro de N’Diaye es la principal preocupación en materia de planificación deportiva del club, pero no la única. En una temporada en la que han sido numerosas las operaciones de préstamo desde el Submarino a clubs de Primera y Segunda División A, no todas se están desarrollando como se esperaba en la entidad amarilla. Akram Afif (Sporting), Pantic y Espinoza (Alavés), Pablo Íñiguez (Rayo Vallecano), Pedraza (Lugo), Adrián Marín (Leganés) y Nahuel (Betis) forman la nómina de cedidos del club, pero son las situaciones de los dos últimos las que más dolores de cabeza están dando al Villarreal. Y por diferentes motivos.

MÁS MINUTOS / El caso que afecta directamente a los planes de futuro del Villarreal es el de Adrián Marín, al que, con 19 años, el club amarillo ve como su lateral izquierdo en un futuro no muy lejano. Habitual en los entrenamientos del primer equipo desde el inicio de su edad juvenil, este año la idea es que el murciano diera un salto de gigante cogiendo experiencia en Primera. El Leganés fue el elegido. Tras un inicio esperanzador, Marín ha visto drásticamente reducido su protagonismo, hasta el punto de que el Villarreal baraja la idea de cambiar el destino de su cesión, aprovechando el inicio del mercado de invierno, para que el defensa pueda disponer de más minutos de máxima exigencia.

Con Nahuel, el problema radica en su casi nulo papel en el Betis, donde no ha cuajado. Así, los dos años de cesión pactados el pasado verano —con el compromiso del club verdiblanco de adquirir en propiedad al hispano-argentino en el caso de llegar a 25 partidos en alguna de las dos campañas— se pueden quedar en nada. Otros equipos de Primera y Segunda, como el Sporting y el Zaragoza, ya han llamado a las oficinas de la Ciudad Deportiva.