El uruguayo Pablo Cuevas derrotó este sábado al español Rafael Nadal, primer cabeza de serie, y se clasificó a la final del Abierto de Río de Janeiro, en la que se enfrentará al argentino Guido Pella.

Cuevas se impuso en tres sets, con parciales de 6-7 (6), 7-6 (3) y 6-4, en un largo partido de tres horas y 28 minutos. El uruguayo, 45 en la clasificación mundial, se empleó a fondo, salió victorioso en la mayoría de las jugadas en la red, sacó réditos de la potencia de su servicio -anotó nueve saques directos- y cometió menos errores que Nadal. El español, número 5 en el ránking de la ATP, fue eliminado en semifinales por segunda vez consecutiva, ya que cayó en la misma fase la semana pasada en el ATP 250 de Buenos Aires.

CUEVAS SE IMPONE

El primer set fue igualado, con una ruptura de servicio por cada lado, y se tuvo que decidir en un 'tie break' muy disputado, que acabó 8-6 para el español. En el juego de desempate, Nadal empezó abajo, remontó con una racha de cuatro puntos seguidos, pero después permitió el empate a seis con una doble falta y acabó imponiéndose gracias a un error no forzado del uruguayo.

Cuevas tuvo un arranque arrasador en el segundo set, llegó a ponerse con un parcial 5-2 a su favor, pero Nadal se recuperó e igualó el marcador. Después salvó un punto de set en contra y forzó el 'tie break'. En este segundo 'tie break', Cuevas se impuso con claridad, sobre todo después de un punto antológico, con varias dejadas y globos, que sirvió para desequilibrar el juego, llevando el marcador a 4-2.

En el tercer set, la primera ruptura de servicio la logró Cuevas para poner el marcador 4-3, luego Nadal levantó un punto de partido en contra, con el marcador 5-3, pero el uruguayo logró cerrar el encuentro en su siguiente servicio.

LA MALA RACHA DE NADAL

"Llevo tres partidos seguidos perdiendo a muy pocos puntos de ganar, tanto en Australia, como en Buenos Aires, como aquí. También un poquito de suerte viene bien. Aunque no creo en ella. Normalmente tiene la suerte el que lo hace mejor y supongo que no habré sido yo", dijo el español después del partido.

Nadal tambén admitió que se iba con un "mal sabor de boca" por haber perdido dos títulos, el de Buenos Aires y el de Río, tras haber llegado a semifinales.

Valoró que ante Cuevas luchó "hasta el final" y estuvo "mentalmente bien", aunque admitió que le "faltó convicción en algunos momentos importantes".