Todo sigue igual en la oficina. Rafael Nadal volvió a salir con el mono de trabajo a la remozada Phillippe Chatrier, por primera vez para él, con el techo cerrado por la lluvia. Entró preparado para seguir acumulando las mejores sensaciones en un Roland Garros que nunca antes, en 15 años, se ha encontrado.

El campeón ha vuelto a mostrarse dueño de ese escenario en el que lleva ganados 12 títulos y busca el 13. Decidido, serio y efectivo no ha dado opciones al italiano Stefano Travaglia (74 mundial) al que se ha impuesto por 6-1, 6-4 y 6-0.

Sin rival

Nadal sigue sin encontrar un rival que le de problemas y está en octavos de final . En la próxima ronda tampoco parece que vaya a tener muchas dificultades ante Sebastian Korda (213 mundial), otro desconocido, que puso fin a las ilusiones del valenciano Pedro Martínez (6-4, 6-3, 6-1) .

El joven tenista estadounidense tiene pedigrí de tenista campeón. Su padre, el checo Petr Korda, ganó el Abierto de Australia (1998) y fue finalista en Roland Garros (1992).

Korda, de 20 años, se ha convertido en el primer jugador nacido el siglo XXI que alcanza los octavos de final en Roland Garros y, además, lo ha conseguido desde de la previa. Además de a Martínez, ha eliminado antes al italiano Andreas Seppi y a su compatriota John Isner.

El hombre que puede esperarle en las semifinales, Dominic Thiem, sigue sin ceder un set a pesar de haber tenido a rivales más duros de los que ha tenido Nadal y Djokovic. Este viernes se ha impuesto al noruego Casper Ruud (6-4, 6-3, 6-1), uno de los jugadores que llegaba en forma a Roland Garros tras alcanzar las semifinales en Hamburgo y Roma.

Wawrinka, KO

Mientras Nadal y Thiem han pasado sin problemas, la sorpresa la ha dado el desconocido tenista francés, Hugo Gaston, de 20 años y 239 mundial, que ha hecho enloquecer a los aficionados franceses en la pista Suzanne Lenglen, al eliminar al suizo Stan Wawrinka, campeón del 2015, en una batalla a cinco sets por 2-6, 6-3, 6-3, 4-6 y 6-0.