Una de dos: o Florentino Pérez sale de los octavos de final contra el PSG con la intención de hacer todo lo que esté en su mano para incorporar a Neymar a la disciplina del Real Madrid, o la estrella del club parisino decide no esperar los cuatro o cinco años que dice su padre para plantearse fichar por el club blanco. Todo dependerá del desenlace de la eliminatoria más caliente de la próxima etapa de la competición, una de las posibles finales anticipadas, que obliga a poner la mayor parte de los focos sobre en lo que sucederá en el Bernabéu el 14 de febrero y el 6 de marzo en el Parque de los Príncipes.

El presidente blanco no dejó dudas, tras la reciente entrega del quinto Balón de Oro a Cristiano Ronaldo, sobre qué es lo que le pide el cuerpo: «Neymar tendría más facilidades para ganarlo en el Real Madrid». «Todo el mundo sabe que yo ya quise ficharle en su momento», añadió.

La histórica remontada del Barcelona ante el PSG (6-1), tras el 4-0 en la ida de octavos de la pasada edición, junto al chasco de no levantar el título en la Ligue 1, no llevaron a Nasser al Khelaifi, sorprendentemente, a prescindir de Unai Emery. Todo lo contrario, le trajeron a dos de los grandes astros del momento, Neymar y Mbappé a cambio de 402 millones de euros (más Alves, que llegó libre). Con el condicionante, eso sí, de que ya no hay escapatoria posible. Si no levantan la Champions, o al menos están en la final, será un fracaso estrepitoso.

El conjunto parisino acabó la primera fase como máximo goleador del torneo, gracias a sus 25 tantos: seis fueron de Cavani, otros seis de Neymar y cuatro de Mbappé. En la Ligue 1, el uruguayo ya ha metido 17 en 16 encuentros, el brasileño suma nueve en 12 y el francés lleva cinco en 11.

«No creo que hayamos tenido el peor sorteo posible, porque tenemos el nivel para afrontarlo», ha recalcado Emery.