El inicio de la temporada 2016/2017 no da tregua y el Villarreal ya debe cambiar de registro a partir de hoy mismo para afrontar de la mejor manera posible el estreno liguero en Granada. Ayer, sin embargo, los jugadores del Villarreal todavía tenían demasiado fresca en la mente la derrota del miércoles ante el Mónaco en la previa de la Champions, que ha complicado un poco más de lo esperado el pase a la liguilla de la máxima competición continental. La misión, el próximo martes en el Louis II, será complicada, pero ¿quién dijo imposible?

A falta de jugadores --habrá hasta siete bajas en la vuelta--, de lo que sí anda sobrado el equipo de Fran Escribá es de fe. La conjura en el vestuario amarillo ya es un hecho y desde el pitido final del alemán Brych en el Madrigal la idea de la remontada empezó a instalarse en las mentes de los jugadores del Submarino.

“No estamos muertos”, apunta tajantemente Sergio Asenjo, que confía ciegamente en las posibilidades de marcar al menos dos goles en el estadio del Mónaco y estar el próximo jueves en el sorteo de la fase de grupos de la Champions que, precisamente, se celebrará en el Principado. “No nos queda otra que ir a Mónaco a competir, a dar la cara y a buscar el resultado que nos clasifique. Este equipo ya ha sido capaz de ganar en campos mucho más complicados en la competición europea, y lo puede repetir”, sostiene el guardameta.

10 RAZONES PARA CREER // Asenjo se basa en hechos objetivos. A lo largo de su trayectoria en los torneos de la UEFA, el Submarino ha sido capaz de sumar lejos del Madrigal hasta una decena de resultados que le meterían en la Liga de Campeones 2016/2017, algunos en estadios tan complicados como el BayArena de Leverkusen, donde el Villarreal venció 2-3 en las eliminatorias finales de la Europa League 2010/2011. La pasada campaña, los amarillos vencieron 2-4 en Praga, y la anterior mostraron su eficacia a domicilio en Astana (0-3), Limassol (0-2 frente al Apollon) y Salzburgo (1-3). Algo más lejanos en el tiempo quedan el 0-3 en Odense (2004/2005), el 0-2 contra el BATE Borisov (2007/2008), el 1-3 en Breda y el 0-2 en Sofía, contra el Levski (2009/2010) y el 1-3 frente al Twente holandés en la Europa League de la temporada 2010/2011.

Si la historia es un punto al que agarrarse en los momentos más complicados, como el actual, las ganas de los futbolistas, sobre todo los que continúan de la pasada campaña, de redondear la sensacional última cuarta plaza en la Liga con el billete para la Liga de Campeones pueden hacer el resto. “Tenemos carácter suficiente para dar lo mejor de nosotros en Mónaco y pasar”, apunta Samu Castillejo, uno de los jóvenes con hambre de Champions. Mario también lanza un mensaje tranquilizador para una afición que sufrirá como nunca el martes: “Haremos todo lo posible para remontar”.

Antes, sin embargo, habrá que hacer un inciso. La Liga tampoco permite demasiados errores. H