Fran Escribá se marchó decepcionado por no sacar nada positivo de San Mamés. El entrenador del Villarreal CF reconoció que el planteamiento pasaba por anular al Athletic en la primera mitad y buscar el triunfo en la segunda.

«Conseguimos que en la primera parte no pasaran cosas, con la idea de ir madurando el juego y con el paso de los minutos intentar llevarnos el choque», dijo.

El preparador amarillo no ocultó que «en la segunda quisimos dar un paso adelante. El partido se abrió un poco, pero el gol nos hizo mucho daño, ya que no tuvimos capacidad para generar ocasiones apenas y de darle la vuelta al partido», comentó, añadiendo que «lógicamente nos sentimos decepcionados porque buscábamos sacar algo positivo».

«Durante bastante tiempo el planteamiento nos salió bien, pero luego no fuimos capaces de darle la vuelta al marcador, ya que tuvimos poca llegada», prosiguió el míster groguet.

La resignación era clara. «Sabíamos que el Athletic venía sufriendo en casa en muchos partidos y supimos maniatarlos bien en la primera mitad. En la segunda mitad, ya con dos delanteros, con Bakambu y Pato frescos, nos acercamos tanto como esperábamos», remarcó el valenciano.

Incluso defendió su planteamiento: «No es que queríamos ganar en los últimos 20 minutos, pero sí queríamos que en la primera mitad no pasara nada. Una parte cumplimos y en el tramo final nos faltó llegada».

Por último, explicó cómo encarar el partido de Europa League. «Fuera de casa cuesta sacar los partidos. Jugábamos en San Mamés. En Zúrich será el planteamiento más ofensivo y vamos a salir a ganar desde el primer momento», terminó Escribá.