El base canadiense Jamal Murray ofreció un recital anotador para los Denver Nuggets que se impusieron por 114-106 a Los Angeles Lakers y recortan así su desventaja a 2-1 en la final de la Conferencia Oeste de la NBA, que se disputa en la burbuja de Orlando.

Murray acabó el partido con un doble-doble de 28 puntos, incluidos 4 de 8 en triples, repartió 12 asistencias, capturó ocho rebotes y recuperó dos balones. Su labor contó con la ayuda de una aparición inesperada, la del ala-pívot Jerami Grant, que acabó el encuentro con 26 puntos, su mejor marca individual, lo que hizo saltar por los aires el esquema defensivo de los Lakers, que estuvieron durante todo el partido por detrás en el marcador.

Al comenzar el cuarto periodo el equipo de Denver tenía la ventaja parcial de 97-80 y aunque los Lakers intentaron la remontada esta vez no hubo ninguna canasta "milagro" como sucedió en el segundo partido y comenzaron a sentir la presión de los Nuggets.

El pívot serbio Nikola Jokic también hizo su labor de jugador clave en la ofensiva del equipo de Denver y aportó otro 'doble-doble' de 22 puntos, 10 rebotes y cinco asistencias, mientras que el base reserva Monte Morris acabó con 14 puntos como sexto jugador de los Nuggets y completó la lista de los cuatro de su equipo que tuvieron números de dos dígitos.

Canastas decisivas

Murray, además de ser el líder encestador, siempre respondió con las canastas decisivas, como los dos triples consecutivos en la recta final del partido, cuando los Lakers seguían en su intento de la remontada. Los Nuggets perdieron casi la totalidad de una ventaja de 20 puntos en el último cuarto, pero se mantuvieron para ganar, evitando un hoyo de 3-0 que habría sido abrumador incluso para este equipo que es especialista en remontadas.

Denver ha establecido un récord al superar dos desventajas de 1-3 en lo que va de la fase final ante los Jazz de Utah y Los Angeles Clippers, pero ningún equipo de la NBA ha vuelto de 0-3 adverso en series de playoffs.

Lebron James volvió a brillar en el apartado individual con un 'triple-doble' de 30 puntos, 11 asistencias y 10 rebotes que lo dejaron al frente de los Lakers, que siguen a dos victorias de su primera aparición en las finales de la NBA en una década.

Anthony Davis, quien hizo el triple ganador al sonar la bocina en el segundo partido, esta vez acabó con 27 puntos, pero ninguno decisivo y sin presencia en el juego interior.