Había algo más que tres puntos en juego en el Noulas. A los anfitriones solo les valía la victoria para asomar la cabeza por abajo. Y al final ganaron al Huracán en un encuentro que tuvo de todo en la segunda parte: goles, expulsiones y emoción a raudales. Fue, la de ayer, la primera victoria de la temporada como local para los muchachos de Codrut Aioanei, y la segunda consecutiva tras vencer siete días atrás en el campo del Almenara.