El movimiento sísmico que ha sacudido al Villarreal en los últimos días, con las lesiones de Bakambu y, sobre todo, Soldado, y el cambio de dirección técnica del equipo tras la destitución de Marcelino han convertido la preparación de la decisiva eliminatoria para entrar en el grupo de 32 elegidos de la próxima Champions en una especie de lucha contra el crono para el nuevo inquilino del banquillo amarillo, Fran Escribá, que tendrá apenas cinco días no solo para conocer a la plantilla, sino también para intentar sacar el máximo nivel competitivo del grupo disponible para disputar la ida del próximo miércoles en el Madrigal.

SIN EXPERIMENTOS // Después de la primera toma de contacto de Escribá con los jugadores el pasado jueves, el día de su presentación, el técnico valenciano empezó a preparar ayer el compromiso ante el Mónaco. En principio, Escribá ya ha dejado clara su intención de no hacer experimentos ante lo que es la primera finalísima de la temporada para el Submarino e irá a lo seguro, al terreno conocido.

La lógica dicta que ante la falta de tres de sus cuatro delanteros de la plantilla --además de Bakambu y Soldado, el italiano Sansone no podrá tomar parte en la ronda de play-off de la Champions al haber jugado con el Sassuolo las previas de la Europa League-- Escribá pueda decantarse por un 4-2-3-1, su sistema de cabecera tanto en el Elche como en el Getafe. En su primer día al frente del equipo resolvió con un escueto “ya veremos” la cuestión, pero la realidad es que el brasileño Alexandre Pato, que no está aún al 100%, será el único delantero alineable ante los franceses; recolocar al único medio con alma de delantero, Roberto Soriano --también inmerso en pleno proceso de adaptación al equipo--, sería una solución un tanto arriesgada si quiere mantener el 4-4-2 al que están acostumbrados la mayoría de los que serán protagonistas el miércoles en el Madrigal.

EL ÚLTIMO ENSAYO // Hoy mismo podríamos salir de dudas, en el último test antes de entrar de lleno en la competición que los amarillos afrontarán en Butarque, frente al nuevo equipo de Primera División, el Leganés (20.30 horas). Será el momento de comprobar no sólo que solución ofensiva plantea Fran Escribá para que no se noten las ausencias ofensivas en su primer compromiso oficial al mando del Submarino, sino para ver sobre el terreno de juego las primeras propuestas del nuevo técnico y los encargados de plasmarlas. H