El Castellón no quiere dejar de escribir una de las páginas que, pese a militar en Tercera, permanecerán en los anales del club. Para no poner el punto y final, debe vencer al Rayo Ibense, en el arranque de la segunda vuelta, con el fin de prolongar la racha de victorias consecutivas a ocho. Es, sin duda, el mejor aliciente para este encuentro de Castalia, nuevamente al mediodía.

Un estratosférico registro que se le resistió a Ramón María Calderé (hace justo un año, aquella borrachera de triunfos se quedó en siete, por el empate en Orriols), que se convertiría en la segunda racha más prolongada en la historia del club, empatando con la que los albinegros consiguieron, entre las jornadas 4 a 11, de la temporada 57/58, entonces cuando la Tercera División era la Tercera División. De siete años después, en la misma categoría, data el récord, cuando los orelluts iniciaron la campaña 64/65 con una docena de triunfos.

“Si eso sirve para que el equipo salga más metido en el partido y se emplee con más intensidad, bienvenido sea”, ha manifestado Kiko Ramírez, en un intento de rebajar un poco la presión en este sentido (pero, ¡bendita presión!). Lo cierto es que él es el primero aguijoneado por tan histórico estímulo, para el que dispone de un mayor potencial ofensivo.

MOVIMIENTOS // Semana nuevamente con novedades pues, en un espacio de horas, Lolo ponía rumbo al Badajoz y el club ratificaba la confianza en Raúl Carmona, a prueba desde el regreso del equipo de las vacaciones navideñas, haciéndole contrato.

El habilidoso extremo izquierdo está a disposición del tarraconense, al igual que Diego Carrillo (no entró en la convocatoria frente al Recambio Colón por un breve percance muscular) y, sobre todo, Rubén Fonte, quien espera haber dejado atrás, por fin, los problemas en el hombro, que no le han dejado jugar en el último mes. A Gaizka Saizar todavía le faltan una semanas, en tanto que Ramírez no ha querido forzar a Borja Gracia, la otra baja.

Marc Castells también arrastra molestias desde el encuentro desde hace días, con lo que el preparador tarraconense lo tiene todo para repetir la alineación.

El Castellón confía en seguir exprimiendo la benignidad de un calendario que, en tres jornadas, se empinará, y de qué forma. Con todo, Ramírez ya se ha encargado de advertir que el Rayo Ibense, un recién ascendido que ya tiene sellado billete y medio de su permanencia, opondrá más resistencia que Buñol y Recambios Colón, los dos últimos comparecientes en Castalia, que terminaron siendo, incluso, goleados (3-0). H