Óscar Cano desdramatiza la situación del CD Castellón (siete jornadas sin ganar y seis derrotas consecutivas) y esconde hasta qué punto va a modificar el equipo que naufragó en el Carlos Tartiere cara al duelo de este domingo (18.30 horas) ante el Cartagena en Castalia.
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«No recuerdo una superioridad tan aplastante ante un equipo al que yo haya podido dirigir, ni en el fútbol profesional, ni en el aficionado o en juveniles, sentir esa sensación tan de inferioridad...».
EL OBJETIVO
«Quiero ver al Castellón tan competitivo de las primeras jornadas, que tan difíciles ponía las cosas a sus rivales siendo merecedor de más...».
LO QUE DESCARTA
«Las revoluciones, el estilo... es un mal común: todo el mundo habla [de ellos] cuando vienen mal dadas».
LA REIVINDICACIÓN
«Hasta Oviedo, considero que hemos sido un equipo muy competitivo; no lo digo solo yo, sino gente del fútbol pero, sobre todo, mi vestuario».
SU PUESTO
«Agradezco a la gente que tenga memoria porque aquí, conmigo, han ocurrido cosas con una contundencia y una rapidez que nadie esperaba».
EL CONTEXTO
«La situación no es absolutamente crítica, ni se puede hablar de finales».
LA LIBERACIÓN
«Cuando uno toca fondo es liberador, puede que esto sea el punto de inflexión para volver a ser lo que fuimos».
LA DIRECCIÓN DEPORTIVA
«Ha hecho una buena labor, porque es difícil trabajar sin los medios cuando se tienen tantas limitaciones económicas».
MARC MATEU
«Es importante por muchas razones: por lo que produce, la hombría de responsabilizarse de muchas cosas del equipo, es un jugador muy respetado en la categoría... Además, es un recurso para ir al espacio, esencial a balón parado..., pero no debemos hacerlo más responsable de lo que es».
