El Madrid salvó el tipo ante un rival idóneo (Pako Ayestarán lleva 12 derrotas seguidas contando su etapa en el Valencia y ahora en el banquillo de Las Palmas) para recobrar parte de la autoestima y el crédito perdido. En otra noche para la desesperación de Cristiano, negado ante el gol, emergió Asensio para devolver la luz al equipo de Zidane. El mallorquín marcó un gol de bandera y abrió la jugada del tercer tanto en otra noche oscura de Benzema, que se llevó la bronca del público.

Lejos de proponer un choque atractivo ante el equipo más goleado de la tabla (28 tantos), que llegó al Bernabéu con seis derrotas seguidas, el Madrid se entregó a la inercia que terminaría por inclinar el choque de su lado.

Con muchos problemas para explotar la debilidad de la defensa canaria, el equipo blanco volvió a enredarse en un juego muy pobre, sin conexión entre líneas y con pocos recursos ofensivos.

Zidane mantuvo a Benzema, que solo tardó tres minutos en escuchar la bronca del público tras un mano a mano con Raúl que estrelló el balón contra el cuerpo del meta. El enfado creció tras una ocasión de Vitolo que rechazó primero Casilla y luego Vallejo. Poco a poco, el encuentro se fue tornando plomizo. Cristiano intentó despertar al personal con un fuerte disparo poco antes de que Benzema recibiera otra ración de pitos por su desidia. La bronca fue a más al no acertar a cabecear un centro de Asensio.

Cuando todo apuntaba a que el marcador no se movería, un saque de esquina de Asensio lo tocó Dani Castellano para que Casemiro adelantara al Madrid.

PRIMER GOL DE CABEZA // Era el primer gol de cabeza del Madrid en la temporada y el tanto que llevó una cierta calma a la grada. Sin embargo, los sobresaltos continuaron con un agarrón de Casemiro sobre Vitolo dentro del área blanca. El árbitro miró hacia otro lado y en la siguiente acción apareció Asensio para recuperar todo su esplendor con un zurdazo espectacular fuera del área.

El tanto confirmó la mejoría del Madrid, con esa chispa que pide Zidane. Con un juego directo, cerró el choque con otra jugada polémica. Una falta de Ramos no señalada propició un contragolpe que inició Asensio para que Cristiano asistiera a Isco, que marcó con la izquierda.