La llegada de Adrián López ha ocupado la única ficha libre de la que disponía la entidad amarilla para dejar paso a nuevos efectivos en este plazo de fichajes, ya que desde la rescisión de Jokic no se ha producido ningún movimiento de salida. Así, el objetivo del Villarreal de reforzarse con un delantero de referencia pasa inevitablemente por hacer más hueco en el grupo que dirige Escribá. Por lógica —aunque esta no siempre impera en el fútbol—, la entidad amarilla debería trabajar en reducir su nómina de delanteros, que se incrementaría a siete efectivos si, finalmente se cierra la operación de Caicedo o alguna otra de las alternativas que se barajan en el caso de que haya una negativa del Espanyol.

En principio, la solución más sencilla sería la de renegociar con el Atlético la situación de Santos Borré, buscando en los días que restan para el cierre del mercado otro destino en la Liga en el que el colombiano de 21 años pudiera disponer de más protagonismo. Esta opción, sin embargo, también colisiona frontalmente con el código del Villarreal, que siempre suele mantener sus compromisos cuando se trata de cesiones, bien sea de entrada a su propia plantilla como de salida para foguear a futbolista de su propiedad. En el caso de Borré, su marcha debería contar totalmente con el visto bueno del Atlético.

El caso de Pato es diferente, ya que el Villarreal recuperará, en el peor de los casos, a mediados de febrero a Bakambu —el 14 del próximo mes finaliza la Copa África. Y un mes más tarde espera que Soldado empiece a tener protagonismo en el equipo de Escribá. Llegados a ese punto—con Sansone como intocable—, el punta brasileño podría ver menguada significativamente su participación.

LOS DÓLARES CHINOS / Por ello, la entidad que preside Fernando Roig estaría dispuesta a aprovechar el tirón mediático del exmilanista, muy apetecible para algunas de las ligas emergentes que no escatiman a la hora de realizar ofertas millonarias para tener a grandes nombres en sus competiciones. Hace un año Pato rechazó —según la prensa brasileña— una oferta de 45 millones de dólares para unirse al Tianjin Quanjian, pensando en una nueva oportunidad en Europa que, finalmente, le brindó el Villarreal. Quizás ahora podría llegar el momento de replantearse una aventura en el gigante asiático.