El Peñíscola concluyó la pasada temporada en la sexta posición del grupo I de Segunda Regional con 48 puntos, a 20 del campeón y ascendido a Primera Reigonal. Tras una temporada en la que el equipo se esperaba que luchara por el ascenso, en la actual los peñiscolanos están disposición de pelear de todas todas por el ascenso de categoría.

Para alcanzar dicho objetivo el el técnico es Álex Alonso, sobrino del conocido exfutbolista del Barcelona, Castellón y Zaragoza. El joven técnico continuará por segunda temporada consecutiva en la entidad con la intención de devolver al equipo del Benedicto XIII a Primera Regional.

Equipo reforzado // El Peñíscola saldrá a competir con un equipo compensado y con potencial en todas sus líneas. Entre los fichajes más destacados del verano figuran los del portero Rubén Peinado, que la pasada campaña defendió la portería del Alcalà en Preferente; los defensas Javier Vizcarro y Cristian Aguilera, que proceden del Traiguera, donde durante los últimos ejericios cuajaron grandes actuaciones.

Para el centro del campo llegan Eloy Sánchez, del Càlig e Iván Saura y Franklin Stalin procedentes del Sant Jordi, donde han sido baluartes en las últimas temporadas. Para la punta de lanza se ha incorporado al fichaje estrella, el nigeriano Felipe, un jugador ha desarrollado una trayectoria dilatada en el fútbol provincial en el Alcalà y Benicarló entre otros, un atacante con velocidad, desequilibrio y mucho gol.

Además del primer equipo, en el Peñíscola apuestan también por la cantera, por eso el club está planificando un proyecto de una escuela de fútbol base potente de la que sacar nuevos jugadores de la casa. Otra de las máxima que tiene la actual junta directiva del club pasa por unir a la familia del club que actualmente está dividida desde hace unas temporadas y volver a levantar a la entidad a todos los niveles existentes.

El conjunto albiazul aspira a lograr el tan ansiado ascenso a base de buen fútbol, con un juego combinativo que de espectáculo y enganche al aficionado a asistir al campo cada quince días. La ilusión es muy alta en el seno de un club en el que no habrá excusas al final de la campaña en caso de no conseguir el ascenso a Primera Regional. Al menos, la plantilla tiene potencial más que suficiente para lograrlo. H