Mauricio Macri cuadró su repleta agenda para agasajar como merece a la delegación del Villarreal, que esta tarde regresa a España después de tres intensos días en Buenos Aires. La visita del Submarino a Argentina tuvo su punto culminante en La Bombonera, en el amistoso de la pasada madrugada, pero la recepción oficial del presidente del país sudamericano también fue otro de los momentos inolvidables de esta mini gira amarilla. Entre la importante reunión con el primer secretario de estado británico —Philip Hammond— y un multitudinario mitin en Jujuy, Fernando Roig y el resto de la cúpula del Villarreal fueron los protagonistas en Olivos, la residencia del jefe de estado.

La cita con Macri fue una muestra de respeto del presidente anfitrión hacia el club con más calado en Argentina en los últimos años, con permiso de Madrid y Barça. Y algo así como un agradecimiento del expresidente del Boca Juniors, que cimentó algunas de las principales del club bonaerense con el Villarreal como partenaire. Ventas como las de Arruabarrena, Diego Cagna, Battaglia o Martín Palermo fueron un gran impulso económico para el club que desde 1995 hasta el 2008 tuvo al actual presidente argentino como principal mandatario. El regreso de Riquelme al club porteño fue otro de los logros de Mauricio Macri ligados al Villarreal de Roig.

LA LISTA DE INVITADOS / Así, Macri recordaría ayer viejos tiempos junto a Roig y, sobre todo, con José Manuel Llaneza, el hombre encargado de negociar con el actual presidente argentino la gran mayoría de las transacciones efectuadas con la entidad amarilla. El vicepresidente fue otro de los invitados de honor en la Quinta Presidencial de Olivos, junto al consejero delegado del Villarreal, Fernando Roig Negueroles; la consejera del club Elena Roig, acompañada por su esposo, Pepe Castro —mano derecha de Carlos Bianchi en la última etapa del prestigioso técnico en el Boca Juniors—; y el alcalde de Vila-real, José Benlloch, que aprovechó una gran oportunidad para «reforzar» las marcas de Vila-real de «ciudad de la salud y del deporte y ciudad del fútbol siempre de la mano de nuestro principal embajador, el Villarreal CF».

El último acto institucional del Submarino en Argentina, pese a ser el de más etiqueta, se desenvolvió en un ambiente muy cordial, como no puede ser de otra forma, entre dos personajes, Macri y Roig, que han tenido mucho que ver en el despegue del Villarreal en la élite del fútbol europeo, el primero como principal surtidor de estrellas; el segundo como el mejor cliente de la etapa futbolística del presidente de la nación argentina.