El italiano Lorenzo dalla Porta (Honda) se adjudicó la victoria en el Gran Premio de Japón de Moto3 que se disputó en el Circuito Twin Ring de Motegi y literalmente sentenció la pelea por el título mundial de la categoría de 2019 beneficiado por la caída y posterior retirada de su único rival, el español Arón Canet (KTM). Un gran premio en el que el piloto burrianense Sergio García Dols ha logrado la mejor clasificación desde que debutara esta temporada en el Mundial, ya que el piloto de Honda del equipo Estrella Galicia 0,0 ha finalizado quinto, obteniendo 11 puntos para la clasificación y superando el 7º puesto conseguido en el GP de Aragón.

Tras esta proeza, en una prueba en la que se estuvo codeándose con los mejores e incluso pudo pelear por acercarse al podio, García Dols ocupa la posición 22ª en la clasificación general del Mundial de Moto3 con 31 puntos.

Canet se fue por los suelos en el decimocuarto giro cuando estaba con el grupo de cabeza y muy a su disgusto tuvo que retirarse, dejando el camino expedito a su rival, quien supo aprovechar la oportunidad para lograr su segunda victoria de la temporada, que le permite aumentar la ventaja en la provisional del mundial hasta los 47 puntos, lo que le sitúa en una posición óptima para proclamarse campeón del mundo con sólo sumar tres puntos más que el español en la carrera de Australia, la próxima semana.

LA CRÓNICA

Nada más apagarse el semáforo rojo, el japonés Tatsuki Suzuki (Honda) salió como una exhalación con el claro objetivo de intentar ser "profeta en su tierra" con Alonso López (Estrella Galicia 0'0 Honda) pegado tras su estela, mientras que el líder del mundial, el italiano Lorenzo dalla Porta (Honda) y el español Arón Canet (KTM), comenzaron su marcaje "al hombre" desde la séptima plaza.

Ya en la primera vuelta la carrera perdió a dos de sus hombres importantes en el mismo percance, el argentino de origen español Gabriel Rodrigo (Honda) y el checo Jakub Kornfeil (KTM), un incidente que fue investigado por Dirección de Carrera.

Suzuki se mantuvo al frente de la carrera en las primeras vueltas, a ritmo de vuelta rápida en cada ocasión mientras por detrás Arón Canet superó a Lorenzo dalla Porta para intentar alcanzar a los pilotos de cabeza en un grupo en el que estaban prácticamente todos los favoritos de la categoría.

Canet fue recuperando posiciones poco a poco pero con firmeza para colocarse en la cuarta posición en el transcurso de la quinta vuelta, en la que Suzuki seguía liderando, por delante de Sergio García (Estrella Galicia 0'0 Honda), que había dado buena cuenta de su compañero de equipo Alonso López, al que también superaron Albert Arenas (KTM) y John McPhee (Honda).

El piloto nipón, pupilo del equipo de Paolo Simoncelli, se mantuvo firme en cabeza de carrera con cambios constantes tras su estela, aunque con neto color español por la presencia de Albert Arenas, Sergio García, Arón Canet y Alonso López, aunque éste dio síntomas de debilidad y de no aguantar el ritmo de quienes le antecedían a partir del quinto giro.

Ya en la séptima de las veinte vueltas a las que estaba programada la carrera se pudo ver claramente la estrategia de Lorenzo dalla Porta, líder del mundial, que marcó estrechamente a Canet desde el mismo momento en que le superó y cuando el español se puso segundo el italiano estaba pegado a su rebufo.

Canet se "coló" en la apurada de frenada de la entrada al primer túnel en la vuelta ocho y ese momento lo aprovecharon tanto Dalla Porta como Arenas para superarlo, aunque enseguida recuperó el aliento para intentar responder al ataque del italiano, que antes de finalizar el noveno giro ya era líder.

Otro italiano, Tony Arbolino (Honda), tercero en la clasificación del mundial fue el siguiente protagonista al sufrir una caída durante el décimo giro en la quinta curva y después de haber protagonizado una espectacular remontada desde la vigésimo séptima plaza, penúltima línea de la formación de salida, hasta la octava.

Con ese incidente, que le obligó a retirarse, el italiano prácticamente dijo adiós a sus posibilidades en el campeonato del mundo, mientras por delante siete pilotos -con otros tres un poco más atrás- se destacaron al frente de la carrera, en esos instantes encabezada por Lorenzo dalla Porta.

Además del líder del mundial estaban en el grupo Tatsuki Suzuki, Sergio García, Albert Arenas, Celestino Vietti, Arón Canet, John McPhee y un poco más atrás Jaume Masiá -que acabó enganchando con el grupo de cabeza, aunque una colada al final de la vuelta le volvió a rezagar-, Alonso López y Marcos Ramírez.

En el decimocuarto giro se produjo un incidente que prácticamente sentenció no el vencedor de la carrera pero si, prácticamente, el campeonato, pues el español Arón Canet se cayó en la curva nueve y aunque regresó a la prueba lo más rápidamente posible, lo hizo en el vigésimo primer puesto, lo que le dejaba sin puntuar y permitía a Dalla Porta pensar ya en el título mundial, avisado rápidamente desde el muro por su equipo con un contundente "44 Out", el dorsal del español.

Canet, muy enojado, entró en su taller y dio claras muestras de que iba muy "colgado" para intentar seguir a sus rivales.

La pelea en cabeza dejó a sólo cinco pilotos, con Dalla Porta líder, perseguido por Suzuki, García, Arenas y Vietti y un poco descolgado de ellos McPhee.

El vencedor se iba a dirimir en la última vuelta, en la que Lorenzo dalla Porta intentó cerrar todos los huecos a sus rivales, que aunque lo intentaron no pudieron con el italiano, quien literalmente sentenció la pelea por el título mundial.

Le acompañaron en el podio el español Albert Arenas y el italiano Celestino Vietti.

Sergio García se tuvo que conformar con la quinta posición, con Jaume Masiá séptimo, Marcos Ramírez (Honda) en la octava plaza, por delante de Alonso López y con Raúl Fernández (KTM) en un más retrasado decimonoveno lugar.