Castellón y Almazora disputan este viernes (20.45 horas) el primer partido oficial entre el Castellón y el Almazora en Castalia. Manu Calleja e Iván Medall, entrenadores de ambos conjuntos, analizan el encuentro.

Manu CallejaManu Calleja no sabrá, hasta pocos minutos antes del arranque del partido, con qué jugadores puede contar: «Ojalá pudiera hacer ya el once, pero tengo que juntar las piezas del puzle», certifica el cántabro, para quien tanta lesión es producto «de las alturas del campeonato en las que nos encontramos y situaciones que no puedes controlar, como el cruzado de Abraham». «El césped de Castalia no influye, sino la alternancia de superficies a la hora de entrenar y jugar», explica Calleja.Para el preparador albinegro, el Almazora vendrá a «trabajar y a correr como nunca lo ha hecho». «Es un derbi, así que olvídate de que vienen en mala dinámica». «En dos partidos podemos estar otra vez en play-off, alguno caerá», opina.Calleja, no obstante, admite que «la situación del club es un entorno tan complejo...». «La comida después del partido en Elche fue una conjura para tratar de aislarnos de todo», acaba.Iván MedallIván Medall pronuncia en voz alta el sentir generalizado el vestuario del Almazora. «Lo tenemos marcado en rojo, es el partido que cuando salió el calendario, todo el mundo miró en qué fechas caía», destaca el técnico blanquinegro, que lo considera como «nuestro último premio por el ascenso».El Almazora pasó de protagonizar un arranque liguero encomiable, a no haber ganado todavía en este 2017. «No eran normales los resultados de principios de temporada, ni tampoco los de los últimos meses», sostiene Medall. «A la vuelta de las vacaciones de navidad no hicimos las cosas tan bien como hasta ese momento, pero ahora ya llevamos varias jornadas compitiendo, dentro de las limitaciones, a nuestro mayor nivel», certifica el entrenador.«No es el lugar donde debamos ir a por los tres puntos, pero si llevamos el partido a donde queremos, tendremos nuestras opciones», constata.