Parece que hoy viste hablar mal del Castellón. La moda es buscar cosas negativas en todo lo que huele a albinegro. Las secuelas de la gestión de los imputados de Castellnou continúan manteniendo al Castellón en alarma roja. Pero llega un momento en el que hay que cambiar la moda y pensar en positivo. Me viene a la cabeza una frase de John Fitzgerald Kennedy: “El vínculo más básico que tenemos en común es que todos vivimos en este pequeño planeta. Todos respiramos el mismo aire, todos valoramos el futuro de nuestros hijos y todos somos mortales”. Si quieren, cambien las palabras planeta, aire, futuro de nuestros hijos y mortales por CD Castellón y seguramente la óptica será distinta sobre el lo que lo que significa ser, apoyar y sentirse de un Castellón con una delicada salud.

Sinceramente, entiendo las dificultades económicas para abonar las nóminas. Si hay clubs en Primera División que les cuesta cumplir sus compromisos, ¿cómo no le va a suceder al Castellón?

Los ingresos por abonos de esta temporada apenas han superado los 200.000 euros, prácticamente lo que se va a gastar en pagar los plazos de Hacienda y Seguridad Social, que la próxima temporada se doblarán. Luego están el resto de gastos de uso corriente y las nóminas. Sin ingresos de televisión y con cero euros de ayuda del Ayuntamiento. Con algunas fuerzas políticas que piensan que el estadio Castalia debe ser disfrutado por los clubs de fútbol base de la ciudad, cuando se construyó para que el Castellón nos deleitase en la élite. Es un símbolo de la ciudad y hay que rescatarlo y ayudarle, no dejarle enchufado en la UVI para que no moleste. Ahora está solo. Ya ni me sirve que con David Cruz no se va a ninguna parte. Es una disculpa demasiado fácil.

Soy apolítico convencido. Es evidente que tengo amigos que se dedican a la política en todos los partidos del espectro municipal. En todos. Son y seguirán siendo mis amigos coincidan o no sus planteamientos con los míos, pero considero que el CD Castellón merece respeto.

Al Castellón le falta acercarse a la gente y una buena política de comunicación. Ahora llega Jordi Bruixola. Apenas le conozco, más allá de su labor como responsable de prensa del Valencia CF. Le deseo lo mejor y me consta que llega con muchas ganas de sacar adelante este proyecto. Ayer observé demasiado cemento en las gradas de Castalia, por cierto con un césped en inmejorables condiciones. Bruixola tiene que trabajar para que la gente despierte su sentimiento albinegro. Digo despertar porque nunca ha muerto. Es momento de olvidar y enterrar diferencias. Dentro de un mes el Castellón estará inmerso otra vez en la lucha por el ascenso, totalmente imprescindible para el club.

Cruz, con sus muchísimos defectos, está hoy en China a la búsqueda de ingresos. La tarea es complicada, pero quien no se mueve no logra nada. Luis Martínez, diputado de Deportes, viajó ayer a Shangai. Parece que la Diputación ha decidido dar su apoyo al Castellón. Buena decisión y de la que me alegro.

Todavía quedan buenos albinegros como Hipólito Perales o Miguel Meseguer, por señalar a algunos, que deciden prestar su apoyo al Castellón de forma desinteresada. No por postureo.

No me gusta que se asocie su nombre a cuestiones extradeportivas como las apuestas u otras no relacionadas con el fútbol. El inicio de temporada no fue fácil. Sé los problemas que sufrió Calderé por ciertas prácticas poco éticas, que incluyeron que un jugador, importante para el equipo, reconociera delante de sus compañeros que había efectuado apuestas (en ningún caso por perder). Eso marcó el inicio de temporada, porque se produjeron movimientos en la plantilla con la Liga en marcha. Kiko Ramírez recondujo la situación deportiva. Y se ha llegado a tiempo. El Castellón deberá afrontar tres eliminatorias para ascender. Difícil sí, pero al alcance y con Castalia más aún.

Si quieren que les diga la verdad, yo no soy de Cruz (tampoco quiero estar contra él), pero sí quiero, y deseo, que al Castellón le vaya bonito. Por mí, por mi ciudad, por mis amigos que lloran y sufren sus penas, por el deporte y también porque forma parte de la historia del fútbol. El Castellón suma para que esta provincia crezca deportivamente. Eso sí, cada uno es libre de elegir y de opinar, pero como siempre digo desde el respeto, eso sí es innegociable.

No te preguntes qué puedes hacer el Castellón por ti, pregúntate qué puedes hacer tú por el Castellón. ¿Les suena la frase? PPO. H