El Real Madrid dio anoche un paso firme hacia las semifinales de la Copa del Rey, remontando al Girona con Vinicius exhibiendo liderazgo y Sergio Ramos saliendo al rescate con su acierto goleador (4-2), en un encuentro que adentra al equipo de Santiago Solari en su mejor momento.

Desde una mejoría física indiscutible, el Madrid exhibe una renovada confianza para levantarse de golpes que antes le dejaban noqueado. El Girona, con la receta de acierto —dos goles en dos disparos— con la que eliminó por sorpresa ante el Atlético de Madrid para alcanzar una eliminatoria histórica, golpeó primero —tanto del Choco Lozano, minuto 7— pero cedió ante el empuje madridista que encontró en Vinicius y Odriozola dos pilares, que dio el pase de la muerte a Lucas Vázquez para igualar en el 18.

Los blancos fallaron numerosas ocasiones hasta que en el minuto 42, cayó en la trampa del recorte de Vinicius el Choco Lozano, y el regalo no lo desaprovechó Sergio Ramos para marcar de nuevo a lo Panenka en un lanzamiento tan perfecto que va camino de cambiarle el apellido.

Remontada certificada, el poste evitando el gol de Benzema y una segunda parte por delante en la que se esperaba más del Real Madrid. Pero el Girona salió de la cueva en el 66 y Granell empató de penalti por manos inocentes de Llorente en un córner.

Nuevamente tenía que reaccionar el Real Madrid y apareció su mejor 9, Sergio Ramos, para devolver la tranquilidad. En cuando Vinicius le metió de nuevo velocidad hizo tambalearse al equipo de Eusebio. Marcelo renació para poner el centro al testarazo del capitán a la escuadra.

Y desatado Vinicius, puso una diferencia mayor para la vuelta, con pase a Benzema para premiar su búsqueda del gol y dejar al Madrid a un paso de las semifinales.