La esperanzas de encontrar viva a Blanca Fernández Ochoa son cada vez más pequeñas tras el rastreo de las zonas donde era más probable hallarla. Siete drones han peinado con drones y a pie sin ningún resultado la zona de los Siete Picos, un lugar por el que le gustaba pasear y el punto negro donde se ha producido varias accidentes mortales. También se han cribado el entorno de todos los senderos. Quedan las áreas más inaccesibles por la cantidad de maleza y vegetación que dificulta la búsqueda, pero los equipos de rescate no arrojan la toalla. El miércoles seguirán los drones y el rastreo también por la zona de los picos.

"Tiene que ser entre hoy y mañana que la encontremos si es que está bien", había dicho a primera hora Dolores, una de sus hermanas. "Cada vez tengo la esperanza un poco más bajita, pero la mantengo", ha reconocido al anochencer. La familia es consciente de que "cada día que pasa" es más difícil que se la encuentre con vida. Y miércoles ha pasado sin ni un solo avance, sin ni siquiera una pista nueva.

PISTAS DESCARTADAS

Por la mañana, un grupo ha encontrado un bastón de montaña. "Nos lo han enseñado y no era de Blanca, lo mismo que ha ocurrido con sacos de dormir, tiendas de campaña y otros objetos que han ido apareciendo", ha explicado Adrian Federighi, cuñado de Blanca Fernández Ochoa, que participa en las tareas de búsqueda.

Los perros que utilizan las fuerzas policiales identificaron el lunes un rastro que podía ser de la desaparecida pero quedó descartado en la comprobación posterior. "Los falsos positivos son habituales en este tipo de búsquedas", precisaron fuentes de la Guardia Civil.

La familia creía muy probable que Blanca hubiera sufrido algún tipo de percance en la zona de los Siete Picos. No está muy lejos del sitio donde aparcó el coche. "Se tarda alrededor de una hora", según el jefe del equipo de rescate de alta montaña de los Bomberos de la Comunidad de Madrid, Jaime Gaiteiro, que calificó el área como "la zona cero de la desaparición". Pero ni siquiera los drones equipados con cámaras infrarrojas que detectan puntos diferentes de temperatura ha podido localizar nada.

La principal hipótesis que maneja la policía sigue siendo también de que se trata de una "desaparición voluntaria", es decir, no ha sido forzada por ninguna tercera persona.

OLIVIA SE VA CONCENTRADA

La hipótesis que baraja la familia es que Blanca salió a hacer un recorrido no demasiado largo. Abona esta posibilidad el hecho de que el coche estacionado en la zona de donde parten los senderos del parque natural de las Dehesas de Cercedilla se encontró "el bolso y la documentación", además de 15 euros y unas chanclas, según ha contado el cuñado, Adrian Federighi.

Varios familiares de Blanca, han seguido en los equipos de búsqueda pero no Olivia, su hija, que optado por acudir a la concentración de la selección nacional femenina de rugby siguiendo los consejos de su entorno. "Le puede servir para dejar de pensar en esto todo el rato y siempre puede volver cuando quiera", ha explicado Adrian.