El Real Madrid no encontró oposición en el Galatasaray (6-0), al que trituró con un triplete del joven prodigio Rodrygo, un doblete de Karim Benzema y un tanto más (de penalti) de Sergio Ramos, lo que le permite quedarse a un punto de los octavos de final de la Champions, después de que, tras el segundo partido (derrota clara en París e igualada in extremis en casa con el Brujas), temiera seriamente por su clasificación.

Los blancos, que en Turquía habían vencido por la mínima (0-1), un par de semanas atrás, ya tenían resuelto el partido en la primera mitad, en la que ganaban por 4-0 con dos tantos del brasileño y uno del francés, además del lanzamiento de Ramos a lo Panenka desde los 11 metros. El cuarto tanto llegó también con protagonista de Rodrygo, ya que robó un balón para servírselo en bandeja al galo. El propio Benzema colocó el 5-0 rematando un centro de Dani Carvajal tras una buena subida por la banda derecha (min. 81) mientras que el atacante brasileño completó su hat-trick con un gol en el descuento.

Con esta victoria, el conjunto dirigido por Zinedine Zidane coge aire en la Champions situándose con 7 puntos, por lo que ya solo le hace falta uno en los dos partidos que restan para sellar el pasaporte a octavos de final.

LA MAGIA // Cuando el madridismo esperaba, esta temporada, la explosión definitiva de Vinicius, ha sido su compatriota el que ha tirado la puerta abajo. Con un idilio cara a puerta que su predecesor en el top de esperanzas blancas aún anda buscando, Rodrygo se ha asentado en el once con un rol estelar a base de goles.

La falta de pegada que le condenó ante el Betis el pasado sábado en el Bernabéu (0-0), cuando desaprovechó el desplome del Barcelona en el Ciutat de València a la hora de haberle birlado el lidertato, la transformó en eficacia ante un Galatasaray endeble, con una defensa indigna de la competición ante la que se paseó el paulista como quiso. Tocado por una varita mágica, desde que debutase marcando en el primer balón que tocó, es el jugador que el equipo esperaba para revitalizarse, ese futbolista al que ahora ven capaz de llenar el enorme vacío de Cristiano Ronaldo.