Con el objetivo de agarrarse al liderato antes de la gran cita del 2 de septiembre en el Bernabéu ante Italia, con la que se jugará el primer puesto del grupo, La Roja busca hacer caja ante Macedonia en Skopje, el mismo lugar en el que la selección italiana sudó tinta para arañar un agónico 2-3. La vuelta de De Gea a la portería tras superar sus problemas estomacales y la presencia de Carvajal y Ramos, que no jugaron el amistoso ante Colombia, son las novedades en un equipo en el que Morata y Diego Costa pelean por un puesto en el equipo titular.
El seleccionador no quiere que ningún asunto desvíe la atención de los jugadores. En este sentido, Busquets se refirió al ruido alrededor de Piqué. «Estamos totalmente al margen de eso. Mejor no hablar y centrarse en Macedonia. Es triste que haya ruido porque en casa deberíamos ir todos a una», declaró el jugador del Barcelona.
La Roja lidera el grupo G con 13 puntos, los mismos que Italia, que juega ante Liechtenstein, que cierra el grupo con cero puntos. Se da por hecho el triunfo transalpino por lo que el combinado español no puede pinchar ante el quinto equipo del grupo que solo cuenta con una victoria, precisamente ante Liechtenstein (0-3), y que acumula cuatro derrotas.
«Nos enfrentamos a uno de los mejores equipos del mundo, pero no estoy preocupado. Jugaremos un fútbol agresivo para que España no pueda mostrar su nivel. Ellos cometen pocos errores, pero intentaremos aprovecharlos», afirmó Angelovski. Al seleccionador de Macedonia no le hizo ninguna gracia que le preguntaran por el estado del césped, que no parece el idóneo. «El terreno de juego va a estar en las mismas condiciones para los dos», apuntó el técnico macedonio.
SIN EXCUSAS / Efectivamente, el césped del Arena Felipe II de Skopje no presenta un buen estado, pero tampoco Lopetegui quiso darle demasiada importancia. «Al final tenemos que jugar donde nos pongan», manifestó el seleccionador, que sigue sin conocer la derrota con la Roja. El vasco es consciente de la importancia del choque ante Macedonia. «Son tres puntos decisivos. Nos jugamos estar en el Mundial ante un buen equipo que mereció ganar a Italia y que nos obligará a llegar a nuestros límites. Será un partido exigente y complicado, pero los jugadores tienen las pilas a tope», afirmó Lopetegui.
Además de un rival incómodo, el otro problema para la selección son los jugadores que se perderían el trascendental choque ante Italia si vieran una amarilla: Ramos, Piqué, Busquets, Thiago, Vitolo y Diego Costa.
