Manu Calleja, entrenador del CD Castellón, ha ofrecido la rueda de prensa previa a la visita al Alzira, este domingo, a las 17.00 horas, donde los albinegros tratarán de sumar su 23º partido consecutivo sin conocer la derrota.

Solo una duda. “Salvo Álvaro que es duda, ayer en el partidillo tuvo un golpe fuerte y esta renqueante. Es seria duda”.

Alzira. “Vamos con la idea de ganar, que va a ser difícil. Si ganamos, le dejamos al rival a ocho puntos. No es que los elimines, pero tomas cierta ventaja. Es un buen equipo, hace cosas que en Tercera no se ven… De lo que he visto, es el partido más difícil de los que hemos afrontado. Seguramente, es el partido más difícil. Si hay un equipo que nos puede cortar la racha, es este. Seguramente, vendrán partidos más complejos”.

Cambios. “Algo haremos, no me gusta repetir once porque hay que buscar un factor sorpresa, eso implica el cambio de algún jugador”.

Los delanteros. “Con mi llegada, los más beneficiados son los delanteros, porque siempre jugamos con dos. Por eso aquello de tener a cuatro en la plantilla. A Yagüe lo hemos recuperado para la causa: se le ve alegre, participativo, aportaba trabajo y, ahora, también goles”.

Clyde. “Es un 6 específico y los de atrás juegan con más tranquilidad, es un buen fichaje y se ha adaptado muy rápido al grupo”.

Marenyà. “Quiero que sea mi comodín, se adapta a tres posiciones y si tiene que jugar de lateral, lo hará. Tiene mucho peso en el vestuario y siente la camiseta”.

La racha. “Es mérito también de la etapa anterior, pero no me obsesiona. Quiero trabajar cada partido como si fuera el último, pero algún día perderemos. Aquel Castelló de los 30 partidos sin perder al final no consiguió el ascenso. No es anecdótico y dice mucho de esta plantilla”.

Dirigir en la grada. “Los entrenadores tienen que estar en su hábitat, que es el banquillo. Fuera de casa es más difícil de contrarrestar. Se tiene que resolver ya de manera de inmediata, por mi bien y por el de Frank”.

El ambiente. “Dije que venía a aislar de todo lo ajeno y lo estoy consiguiendo. En el vestuario solo se habla de fútbol, no puedo ser un pirómano en el vestuario. En lo otro, ni soy gestor ni gerente ni nada. Sé que el club está en una situación compleja en la que están ocurriendo muchas cosas, pero no puedo juzgar. Mi obligación es blindar al vestuario para que solo piense en fútbol”.