Un jugador de Les Palmes de Castelló ha sido suspendido por 33 partidos por agredir al árbitro. Un hecho que se produjo el pasado fin de semana en la recta final del partido Moro-Les Palmes de Castelló (4-3) que se jugó en el campo Jesús Beire, del grupo II de Segunda Regional. En el minuto 90 el colegiado vila-realense Albert Fernández Ojeda le mostró la segunda cartulina amarilla al jugador del equipo visitante Iliass Boussou, y la reacción de éste fue agredir al árbitro.

El colegiado necesito de asistencia médica, y el Comité de Competición de la FFCV ha sido tajante. Le impuso un partido por la expulsión por doble amarillo, cuatro «por utilizar lenguaje ofensivo» y 28 «por agredir al árbitro precisando éste de asistencia médica». En total 33 partidos, una de las sanciones más duras que se han impuesto en los últimos años en la provincia de Castellón.