El seleccionador Sergio Scariolo se mostró feliz por haber logrado el pase a semifinales en China, un "objetivo altísimo" que ha sido alcanzado. "Ha requerido un esfuerzo muy grande. Llevábamos muchos años sin superar los cuartos de final en un Mundial y es un grandísimo resultado", valoró el seleccionador, que este miércoles conocerá el rival con el que se medirá en Pekín, que saldrá del cruce entre la República Checa y Australia.

"Que este ejemplo sirva para las generaciones que vienen, que tienen que tener una referencia, no como listón de resultados, porque será imposible que puedan igualarlo, pero como espíritu de competir, de forma de ser de equipo. Eso es un legado impagable el que estos jugadores dejarán", añadió el entrenador italiano, sin negar las dificultades del partido de cuartos.

"UN RIVAL MUY DURO"

"Polonia ha sido un rival muy duro. Nadie está entre los ocho primeros del mundo por casualidad, han dado muchísima guerra porque tienen mucho talento", apuntó el técnico, que tuvo palabras de felicitación para el trabajo colectivo de sus jugadores. El máximo orgullo de este equipo máximo es su cohesión, el compañerismo, el altruismo, los grandes valores del deporte que siempre lo han identificado, subrayó. Puedes tener limitaciones y dificultades pero sabemos superarlas en equipo. Un día puede destacar uno y otro día otro, pero cuando llega el momento del liderazgo los referentes están ahí", añadió.