El Segorbe logró un triunfo para la historia, el primero en su estreno en Tercera División, aprovechando también la primera vez que el Castellón le visitaba en un partido oficial (1-0). El penalti y expulsión de Ramos, rubricado por la transformación de Bielsa al filo del descanso, inclinó el derbi provincial del lado local, sumiendo a los albinegros en la enésima crisis deportiva de sus seis temporadas en Tercera, después de tres derrotas consecutivas.

Los dos entrenadores metieron el destornillador al equipo con cambios de jugadores y de posiciones, los dos desde el 4-2-3-1. El incombustible Bielsa, que ha hecho de la pillería su modus vivendi en la categoría, merodeó el 1-0 en los primeros 10 minutos, con dos remates cercanos que no encontraron portería. La contestación del Castellón llegó, como sus escasas aproximaciones a Kilian, a balón parado. Muy clara la ocasión de Arturo quien, en una maniobra de 9, al límite del fuera de juego, la echó fuera.

El animoso arranque del encuentro fue perdiendo enteros a medida que el fútbol-control de los albinegros, sin mordiente, adormeció las revoluciones del encuentro. Durante más de 20 minutos, el público no tuvo más que llevarse la boca.

Cuando se enfilaba, casi, el camino hacia los vestuarios, Lolo Ivars probó al guardameta local con un trallazo que buscaba la escuadra. Una acción que debía animar a los albinegros, hasta que todo se fue por la borda con una acción de despropósitos, cuyo desenlace fue el penalti de Alberto Ramos y, además, la roja para el lateral izquierdo.

El ondense abandonó el terreno de juego a dos metros de Castelló, sin cruzarse ni la mirada. Bielsa ejecutó la pena máxima y fue a celebrarlo con Dani García. Cuestión de feelings.

Castelló dejó en la caseta a Yagüe para sacar a Juanfran. Con un 1-0 en contra y 11 para 10, el bocairentí se la jugaba sin delanteros. Eso sí, los albinegros pusieron más criterio en su fútbol. Casi empatan en un barullo pero sobre todo en un cabezazo de Lolo Ivars a centro de Abraham. El Segorbe, por vez primera por delante en el marcador en la temporada, se dedicó a contratacar.

mejoría albinegra // Lo siguió intentando, y rozando, el Castellón, claramente muy mejorado respecto al del primer tiempo, pero lastrado por esa doble inferioridad. Si esa actitud y predisposición la hubiesen tenido antes… Los orelluts llegaban, pero adolecían de remate, con un delantero en la grada, otro en la ducha y otro en el banquillo todavía.

Castelló rescató a Víctor Pino, a un cuarto de hora para el final, en tanto que los albinegros seguían sin tirar entre palos, casi siempre con excesiva fuerza en sus disparos. Insistencia sin premio de un Castellón en barrena y un Segorbe que pescó en río revuelto. H