España obtuvo la clasificación para el Mundial 2018 con autoridad y brillantez, despertando de nuevo la admiración del planeta fútbol. Julen Lopetegui ha recuperado la mejor versión de la Roja y, de hecho, competirá el próximo verano en Rusia con el cartel de favorito. Sin embargo, lo ha hecho con un eterno mar de fondo, con constantes polémicas en el cerca de año y medio que lleva en el cargo.

El vasco ha tenido que lidiar situaciones comprometidas, como el adiós a la selección de Iker Casillas, las acusaciones del Real Madrid por la lesión de Álvaro Morata (entonces, delantero blanco) en Wembley o los efectos colaterales de la corrupción en la federación y el posicionamiento en favor de Ángel María Villar del entrenador y varios futbolistas... No obstante, nada como la prolongada polémica en torno a las declaraciones de Gerard Piqué y los pitos que el barcelonista ha debido soportar prácticamente en cada entrenamiento y cada partido celebrado en suelo español.

Ahora que este foco parecía haberse, sino apagado, sí difuminado, la nueva equipación para la cita mundialista ha incendiado las redes y provocado airadas respuestas. No hay tertulia, incluso no futbolística, que, en las últimas horas, no hable de la supuesta bandera republicana en la parte derecha de la camiseta, azul petróleo para los diseñadores de Adidas y morada para muchos ojos.

Poco a poco, los protagonistas, representantes de la federación y los futbolistas que se la pondrán en Rusia, daban su opinión por el tremendo revuelo generado.

Matización federativa

Juan Luis Larrea, presidente interino de la RFEF, recalcó que la equipación «no tiene nada» del color morado que ha despertado una gran polémica por su parecido con la bandera republicana. «Hemos recibido quejas desde lo más alto, reconoció . «Al Gobierno no le hace gracia ni el lío ni la camiseta», declaró a As. «La cosa no tiene fácil solución, porque la comercialización de las prendas comienza mañana [por hoy] y ya hay miles de ellas repartidas por los grandes centros comerciales y por las tiendas de deportes de toda España», añadió Larrea. Así las cosas, no descarta «seguir usando el modelo antiguo hasta que pase la tormenta», aunque es algo que deberá discutir con el patrocinador técnico de la selección, que aporta 25 millones de euros anuales a las arcas de la RFEF.

Además, se trata de un diseño que los responsables federativos, con Villar al frente, dieron el visto bueno hace más de un año, junto al OK de varios jugadores.

Al parecer, la RFEF ha suspendido la presentación de la camiseta (había anunciado «una sorpresa para el miércoles»). Los jugadores posarán para una fotografía oficial y se entrenarán con la camiseta en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas. La prensa podrá tomar las primeras imágenes de los integrantes de la Roja con la zamarra en los 15 minutos abiertos de los que tendrá acceso... pero nada más.

Los que la vestirán

Al margen de multitud de declaraciones de los políticos, tocaba preguntar también a los jugadores. Andrés Iniesta, antes de partir desde Barcelona, resumió el sentir del grupo con una frase cuando varios periodistas estaban esperando a los internacionales españoles del Barcelona en el aeropuerto de El Prat. «Cuánto os gusta la polémica», dijo cuando le preguntaron si él veía azul o morada esa parte específica de la camiseta, que ya estrenará el sábado en un amistoso frente a Costa Rica, en Málaga. El manchego, al ser insistido sobre si el revuelo era excesiva, contestó con un «como siempre, demasiado». Resignación de los internacionales, porque aunque la Roja está invicta durante la era Lopetegui, muy pocas veces acapara comentarios deportivos positivos.

Por su parte, Alberto Moreno, una de las novedades de esta lista pero que ya debutó en 2014 con Del Bosque en el banquillo, manifestó que «es una maravilla ponérsela y que sea o más bonita es un poco absurdo». «Yo me la quiero poner siempre, a mí me encanta», apostilló el lateral izquierdo del Liverpool.