Un gol de falta del defensa serbio Alexandar Kolarov al filo de la hora de juego derribó la fortaleza de Costa Rica (0-1) en el debut en el Mundial de Rusia, que hasta ese momento se había mantenido firme gracias a las buenas actuaciones del guardameta del Real Madrid, Keylor Navas.

La derrota puso fin a la serie de cinco partidos invictos de los cuartofinalistas del pasado Mundial, eliminados entonces por Holanda en una tanda de penaltis.

A balón parado logró Serbia lo que no había podido conseguir con juego, en el que pese a su dominio del partido se estrelló una y otra vez contra la disciplina defensiva de los hombres de Óscar Ramírez. El tanto de Kolarov acabó con un buen trabajo colectivo que hasta ese momento había mantenido el combinado tico, que incluso llegó a disponer de ocasiones para adelantarse en el marcador. Pero volvió a demostrar que tiene la pólvora mojada, como en los tres duelos de preparación anteriores a su llegada a Rusia. Le falta pegada a Costa Rica, al que solo con el rigor táctico no sirve para reinventar la magia de hace cuatro años.

Serbia llevó más peligro, sobre todo por su banda derecha, con incorporaciones de Tosic y del veterano Ivanovic, que cumplió su partido 104 como internacional y arrebató así el récord de su país a Stankovic. Keylor Navas sacó dos balones colgados al área, pero su momento cumbre fue cuando en el minuto 50 ganó con maestría un duelo a Mitrovic que se había quedado solo. En el 56 llegó el gol en un lanzamiento de falta de 25 metros de Kolarov. A partir del gol, los ticos trataron de darle la vuelta, pero no pudieron cambiar el signo del partido.