El guardameta Sergio Rico, del Sevilla, que había cometido dos fallos importantes frente al Getafe y Leganés y que empezaba a ser injustamente cuestionado en el Sánchez Pizjuan, se convirtió, ante el Girona, en el gran héroe del partido, no solo deteniéndole un penalti a Aday Benítez sino frustrando diversas ocasiones de empate y victoria al conjunto catalán. Tras esa tremenda reivindicación, Rico explicó que, en los momentos de crisis, no ha cesado de pensar en Antonio Pretel, un niño de 9 años, sevillista, a quien, a mediados de octubre, le extirparon dos tumores en el cerebro y “al que dedico esta actuación para que siga peleando como pelea, día a día, por volver a la normalidad”.

Desde el día que supo que Antonio tenía esos dos tumores, Rico no ha dejado de interesarse por el niño y seguir, paso a paso, la evolución de su intervención, que se produjo el 19 de octubre, y cuya recuperación va por muy buen camino, pues el niño ha acudido, incluso, a algún partido de su amado Sevilla, como el que le enfrentó al Getafe.

Sergio Rico salva un gol, ante el Girona, en un remate de Espinosa. / EFE / JULIO MUÑOZ

Todo empezó, según relató Antonio Pretel, padre del niño, a la cadena COPE, a principios del pasado mes de octubre, cuando el pequeño Antonio no cesó de pedirle a su padre que buscase la manera de que pudiese hacerse una fotografía con su ídolo Sergio Rico. Antonio se puso en contacto con Jesús Rodríguez, representante del meta sevillista, que le recomendó que se presentase un día en el hotel de concentración del equipo. Y así lo hizo. Y así se hizo la foto.

ASÍ CONOCIÓ ANTONIO A SU ÍDOLO RICO

"Pocos días después, a Antonio, que estaba supuestamente sano, le detectaron dos tumores en el cerebro y tuvo que ser intervenido, el pasado 19 de octubre, a lo largo de 17 horas. Yo, que soy creyente, puedo asegurar que todo está yendo bien porque se trata de un milagro de Dios, no tengo duda y Antonio está saliendo adelante con la ayuda y el cariño de todos, especialmente el de Sergio, cuyo corazón es más grande que el escudo del Sevilla y que, si es grande como portero, más grande es como persona". Pretel explicó que, desde el día que Rico se enteró de que el pequeño Antonio iba a sufrir una dificilísima operación de 17 horas y un postoperatorio plagado de sesiones de quimio y radioterapia "no ha dejado de estar pendiente de él en ningún momento".

Pretel explicó que, dos días antes de entrar en el quirófano, Rico le envió un video, desde el hotel de concentración en Moscú, donde iba jugar contra el Spartak, para animarle y, el mismo día de la operación, un audio animándole y diciéndole que todo iría de maravilla. "Ahora que sabe que mañana (es decir, hoy), tenemos un control importantísimo para confirmar que todo va bien, pese a que Antonio ha tenido que volver a aprender a caminar e, incluso, ir al logopeda, Sergio ha querido volver a enviarle un cariñoso mensaje de ánimo. Nosotros solo podemos decir cosas maravillosas de Rico, porque su ayuda está siendo vital para que Antonio -que es muy valiente y está siendo todo un ejemplo para todos nosotros, especialmente para su hermano de seis años- supere esta terrible enfermedad".