El Sevilla abre el curso 17/18 con la gran novedad de la ausencia en la dirección deportiva de Monchi, quien en una década puso, con su política de fichajes, al equipo en la elite europea, algo que el club confía en mantener, ahora con Berizzo en el banquillo, que suple a Sampaoli.

A Monchi le atrajo la idea de seguir con su modelo en la Roma y quitarse la presión de mantener a su Sevilla en primera línea año tras año con una economía muy inferior a la de sus rivales directos. Le suple Óscar Arias, que lleva una línea de trabajo parecida a la anterior aunque con matices.

Según lo visto en los fichajes efectuados, la política de contrataciones ha cambiado algo y en este curso se han adquirido a jugadores más veteranos y contrastados, casos de las vueltas del argentino Éver Banega, tras un año en el Inter de Milán, y Jesús Navas, después de cuatro en el Manchester City, o de Nolito, quien regresa a España tras estar también en el City. En cuanto a las bajas, han salido jugadores de peso como Vitolo —tras coquetear con la renovación—, Mariano Ferreira, Vicente Iborra, Adil Rami, Samir Nasri o Stevan Joventic.