Esta semana, más que nunca, Fran Escribá habrá tenido que hacer caso omiso a todos los comentarios que rodean el Barça-Villarreal de esta tarde, un choque en el que todo parece centrarse en las opciones de Liga de los de Luis Enrique, pero en el que el técnico considera que su equipo tiene mucho que decir. «Es lógico que la mayoría de la gente piense que vamos a perder. Es más, si yo fuese del Athletic o la Real Sociedad —los dos rivales directos por la plaza de Europa League— también pensaría que el Villarreal va a perder esta semana. Pero nuestra obligación es pensar lo contrario». Y con esa filosofía se presentará el Submarino en el Camp Nou, ante un rival que, con las mínimas diferencias en las que se mueven los aspirantes a plaza europea, no es el mejor. «Nos hubiera gustado cualquier otro menos el Barça, que se juega mucho, tanto como el título», explica el preparador amarillo, que, aun así, no afronta con sensaciones derrotistas el choque ante los azulgrana: «Vamos con la idea de que el empate es un mal resultado, aunque después, si lo sacas, sabes que un puntuar allí está muy bien. Pero, de entrada, queremos ganar».

LA POSESIÓN, CLAVE / O, por lo menos, «intentarlo». La obsesión de Fran Escribá es que el Barça no imponga su dictadura en la posesión, algo que sería como un suicidio para los suyos. «No me gustaría pasar demasiado tiempo a 60 ó 70 metros de su portería. Quiero que pisemos campo contrario y no solo basarnos en el contragolpe para llegar a su área, sino también en el ataque posicional. Tenemos nivel para sumar pases en su campo», esgrime el técnico del Villarreal ante una cita que siempre considera «la más complicada de la temporada». Además de discutirle el balón al líder provisional de la Liga, el técnico también apela a la seguridad defensiva para mantener a raya a un equipo que presenta unos números ofensivos de escándalo. «Superar cada temporada, año tras año, el centenar de goles (104 llevan los azulgrana) es una barbaridad e indica el nivel de sus delanteros». «La idea debe ser la misma que en el partido de la primera vuelta en Vila-real: defender fuerte y muy juntos. Si lo hacemos, seguro que las opciones de marcar aparecen», analiza el entrenador del Villarreal, que tiene plena confianza en el estado de forma de sus hombres más ofensivos para sorprender esta tarde al Barça: «Bakambu está acabando la temporada fenomenal, pero como todos los delanteros, los laterales..».

Eso sí, pase lo que pase hoy en Barcelona, Escribá cree que las opciones de Champions —matemáticamente todavía vivas— no están al alcance. «Pase lo que pase, no nos va a dar para alcanzar la cuarta plaza, ni a nosotros ni a los otros [en referencia al Athletic y a la Real Sociedad]. La diferencia con el Sevilla es excesiva; habría que esperar muchos fallos», explica el míster groguet, que además recuerda que el Sevilla «cierra la Liga en casa ante el Osasuna», que ya firmó su descenso hace dos jornadas.

LUIS ENRIQUE, CAUTO / Si el Villarreal puede permitirse, incluso, fallar en el Camp Nou, no así su rival. Superado el escollo del derbi ante el Espanyol, el Barça regresa a la Liga sin margen de error ante un equipo al que Luis Enrique califica como «complicado», sobre todo por la exhibición de solidez defensiva que le ha llevado a ser el segundo menos goleado de la Liga —solo por detrás del Atlético— y por sus aspiraciones europeas. Por eso el entrenador del Barça afronta con extrema cautela la cita. «El Villarreal es un equipo muy bien organizado, que te hace daño con el balón y que sabe replegarse muy bien defensivamente. Es de los más difíciles de la Liga porque te obliga a exponerte para quitarles el balón», advirtió ayer el técnico culé, feliz por la confirmación de la recuperación de Andrés Iniesta, al que Luis Enrique ya ve para «jugarlo todo hasta el final de la temporada». «Lleva dos días entrenándose y le veo muy bien», explicó el asturiano sobre el 8 azulgrana, que esta misma mañana recibirá el alta como paso previo a su probable inclusión en el once inicial ante el Villarreal.

LA PELEA POR LA LIGA / Evidentemente, la disputa por el título con el Real Madrid tuvo más protagonismo en la sala de prensa de Sant Joan Despí que el propio Villarreal, a pesar de que el propio Luis Enrique intentó que el partido de hoy fuera el centro de su intervención contestando con monosílabos y escuetos «no me interesa» a cuestiones que no estaban relacionadas con la visita del Submarino al Camp Nou.

Aun así, le fue imposible obviar el mano a mano con el Madrid, al que recordó que «el Barça ha ganado seis ligas de las últimas ocho, mientras que el Madrid suma solo una en ocho años». Consciente de que su equipo no depende de sí mismo, Luis Enrique reconoció que «no nos queda otra que ganar todos los partidos que quedan y ver qué hace el rival». Pese a la ventaja de un partido más que tienen los blancos, el entrenador culé cree que «todo se decidirá en la última jornada»... a no ser que el Villarreal dé hoy la gran campanada.