El entrenador del Benigànim, Alfonso López Langa, definió a Pruden Sáez como “uno de los jugadores más desequilibrantes” de la categoría. Acababa de asistir a la exquisitez, en forma de falta directa, con el que el Castellón inició la remontada de aquel partido que un penalti anotado por Koeman había puesto cuesta arriba, pero por lo que el torrentí está destacando es por ser el mejor asistente posible, ese socio que todos sueñan con tener. No en vano, lleva nueve pases de gol.

A cualquiera que le preguntes por el mejor jugador albinegro de la temporada (una vuelta y una jornada), seguro que se debatirá entre ese saber hacer de Charly Meseguer --está reforzado por su idilio con el gol: ocho en los últimos nueve encuentros-- o el espectáculo que ofrece Pruden un partido sí y otro también.

Aun en Tercera, no deja indiferente a nadie y, un año justo después de su llegada a Castalia, exhibe todo su repertorio. Un tipo de futbolista casi en vías de extinción, a veces incluso priorizando más el adorno que el pragmatismo, pero a quien nadie puede discutir, en último término, su aportación. Lleva nueve partidos seguidos o bien dando alguna asistencia o, incluso, marcando.

MERECEDOR DE LLEVAR EL ‘10’ // Castellón no es una plaza más, pese a militar en la cuarta categoría del fútbol español. Su estado de gracia ya empieza a trascender en el mundillo y el jugador cuya ascendencia en el equipo le ha hecho, incluso, merecedor de llevar el 10, está siendo ya muy seguido por clubs de superior categoría, aunque la entidad albinegra, salvo que se contradiga a sí misma, no le dejará salir por una cantidad inferior a las cinco cifras, lo que está al alcance de muy pero que muy pocos conjuntos de Segunda B (tal vez filiales, aunque Pruden ya conoce tres: Valencia, Real Madrid y Elche).

Eso es hipotético. Lo real, lo tangible, es que Castalia está disfrutando con un futbolista diferente (y diferencial), capaz de animar mañanas grises como la del pasado domingo. Jugadores por los que vale la pena hacer el esfuerzo de abonarse o pagar una entrada. Si pule esos detalles que, de tanto en tanto, aún generan el run-rún en la grada, si definitivamente pone la cabeza al servicio de sus piernas (sobre todo, en esa exquisita zurda), seguro que no echa raíces en Tercera. Con 21 años, margen de mejora tiene.

CAMBIO DE ESTILO // Disfruta Castalia y disfrutan sus compañeros, especialmente Meseguer, destinatario de casi la mitad de sus asistencias (cuatro). El Castellón ha pasado de ser el equipo de Rubén Suárez o Rubén Negredo al de Pruden y Meseguer, que personifican el cambio de estilo de un grupo que ha entrado en la historia del club al igualar la segunda mejor racha de victorias consecutivas... Y pueden ser más. H