El Villarreal no está a estas alturas de temporada para muchas rotaciones. Marcelino ya aseguró en la previa del Málaga que cinco días para preparar el partido del Nápoles son suficientes como para la recuperación de sus futbolistas, por lo que todo apunta que jugará con el once de gala la ida de dieciseisavos.

El equipo titular que se conoce de carrerilla cualquier aficionado amarillo será así el que se pondrá en liza, aunque se presentan dos incógnitas, una en cada extremo del campo. La primera, la portería, donde Asenjo, Barbosa y Areola pelean por un puesto.

Atendiendo al titular en esta competición, el argentino parte con ventaja, pero qué mejor día para que Asenjo se vuelva a sentir portero que en la visita del Nápoles. Por no hablar del rendimiento de Areola en Liga, que pelea incluso por el Zamora de la competición doméstica. Con estos mimbres, solo Marcelino sabe cuál será el elegido.

Arriba, Leo Baptistao --que no tiene cláusula del miedo y podrá jugar ante el Atlético el próximo domingo, por lo que el técnico no estará condicionado por esta circunstancia a la hora de darle descanso o hacerle jugar--, compite por un puesto con Bakambu junto a Soldado. Por goles el franco-congoleño es favorito, pero Leo ha vuelto con fuerza y parece más del gusto del entrenador. H